Los populares han presentado a Belén Izquierdo como candidata a la alcaldía de la capital. El acto ha reunido a más de 100 personas y ha contado con la presencia de Alfonso Fernández Mañueco.
La capital ha vivido hoy una tarde en clave electoral. El Partido Popular ha presentado la candidatura de Belén Izquierdo a la alcaldía de Soria, en lo que ha sido su primer acto político, respaldada por grandes nombres del partido a nivel regional, incluido su máximo representante, Alfonso Fernández Mañueco. El también presidente de la Junta de Castilla y León ha desembarcado en la capital con tiempo para dar un paseo por el Collado hasta la plaza Mayor, con parada en el Casino y en una tienda de recuerdos y en el que ha tenido la ocasión de detenerse a charlar con simpatizantes sorianos.
Esto ha retrasado el comienzo del acto, aunque no por ello se ha visto mermada la asistencia. Más de 100 personas han abarrotado el salón de actos del Gaya Nuño y se han levantado a recibir y vitorear a Izquierdo y Mañueco en un encuentro marcado por dos fotos de familia: una al principio y otra al final. La del final, la de rigor, ha reunido a los protagonistas de la tarde sujetando unas camisetas que materializaban el mensaje que ha servido de hilo conductor del acto: arrebatarle la alcaldía a Carlos Martínez no es imposible y el PP va a lograrlo con “sudor”, “entrenamiento” y trabajo duro.
La del principio, sin embargo, podría ser más reveladora y arrojar luz sobre la lista -todavía desconocida- de nombres que arroparán a Izquierdo el 28M. En esta foto han quedado inmortalizadas junto a la candidata 3 de las personas más sonadas para ir en los puestos de salida: Javier Jiménez Santamaría, una de las grandes promesas del partido; Saturnino de Gregorio, amparado por la lista de Ciudadanos hasta la semana pasada y María Madurga, un fichaje ajeno a la política, igual que la propia cabeza de lista, lo que daría un mensaje de “cambio”, “renovación” y alternativa.
Benito Serrano ha abierto el acto y ha comenzado su intervención agradeciendo la presencia de algunos de los grandes nombres del partido en la provincia y la comunidad, como la consejera de Educación, Rocío Lucas, la delegada territorial de la Junta en Soria, Yolanda de Gregorio, o el senador José Manuel Hernando. El presidente del PP de Soria ha ofrecido un discurso dividido en “retos”: algunos ya cumplidos y otros por los que trabajarán a partir de ahora. El primero, la unificación del centro-derecha soriano bajo las siglas populares con la integración de la PPSO y la llegada de “personas que estaban en otras filas”, algo que dará "fuerza" al partido en estos comicios.
El segundo reto, poner fin al “atolladero en el que nos tienen metidos”. “En Soria en estos largos años se ha creado una red clientelar, que todos los que estamos aquí sabemos de qué estamos hablando”, ha denunciado serrano. “Los sorianos también tienen derecho a saber lo que hay detrás de esa comunidad de bienes que ha creado Carlos Martínez Mínguez con Luis Rey”, en una alusión directa a la polémica por la construcción de la quinta planta en el edificio Pajaritos II. Tachando a la actual corporación municipal de “arcaica”, ha manifestado la necesidad de “un cambio" que encabezaría Izquierdo gracias a "abrir las puertas a quien nos pueda aportar para mejorar en política”. Porque consquistar al alcaldía de Soria “no es un reto imposible”.
El líder del PP ha defendido que en 16 años los socialistas “no han sido capaces de generar ningún puesto de trabajo” y se ha referido a Valcorba como un polígono industrial “medio abandonado”. Además, ha lamentado que el Ayuntamiento esté “tratando de paralizar el PEMA” y que “utilice al gobierno central para paralizar proyectos de nuestros pueblos”, aunque también ha asegurado que Mínguez “no tiene ni la confianza de Moncloa ni la de sus propios compañeros en Castilla y León”. Aquí entra en juego el tercer reto para el también presidente de la Diputación: que la capital deje de ser “la madrastra mala con los pueblos de la provincia”. “Hay gente en el Ayuntamiento que se cree que con la supervivencia exclusivamente de la capital, aunque matemos a los pueblos, van a vivir ellos”, ha apuntado, pero “Soria, sin los pueblos, morirá y eso hace tiempo que no lo ven”.
La candidata, Belén Izquierdo, ha protagonizado la intervención más breve de la tarde, todavía primeriza en un mundo que hasta hace poco no era el suyo. Lo ha hecho con un discurso genérico, más centrado en el desarrollo económico y en el que sí han tenido cabida algunos de los argumentos históricos del partido, como la bajada de impuestos, tratando de llevar a su propio terreno su consagración como candidata.
Aun así, se ha manifestado con “ganas de estar aquí” y ha asegurado que su falta de pasado político estará ampliamente compensado con “una dilatada vida laboral”. Haciendo hincapié en el esfuerzo y el trabajo duro, ha aprovechado para explicar su visión de la política: “un espacio para compartir ideas y sinergias, donde demostrar que 1 más 1 son 3 si de verdad se quiere”. Todo, para lograr “una Soria para todos, moderna y atractiva”.
Continuando en la línea de las acusaciones de Serrano a Mínguez y Rey, Izquierdo ha denunciado que “un Ayuntamiento no puede ser un grupo de amigos” y que “nada ni nadie es para siempre”. Por ello, el cambio que propone implica una gestión “para jóvenes y mayores”, perseguir una ciudad “segura, sostenible, cercana y moderna de la que nadie quiere marchar” y volviendo a lo empresarial, con menos impuestos y en la que “la gente quiera desarrollar su proyecto personal y laboral”. “Nuevas caras traen nuevas ilusiones y la cuenta atrás ha comenzado”. Su intervención ha concluido con una alusión a Mañueco: “Como los partidos se empiezan a ganar en los entrenamientos, te pido que te pongas la camiseta, ya que vamos a sudar para ganar, ganar y volver a ganar”.
Ha sido en este momento cuando el presidente del PP en Castilla y León ha tomado el testigo para cerrar el acto con un discurso en el que las elecciones generales tomaban protagonismo, diciendo “no al sanchismo” y un “sí rotundo a Feijóo”. De hecho, las municipales se han percibido en varias ocasiones como un instrumento para llegar al Ejecutivo Nacional. “Una victoria contundente del PP en mayo va a mandar a Sánchez el siguiente mensaje: recoge las maletas que te vas de Moncloa”, ha afirmado.
Entre las críticas al gobierno socialista, se han puesto sobre la mesa asuntos como la reforma del delito de Sedición, la ley del ‘Solo sí es sí’ y las rebajas de condenas a agresores sexuales o la amenaza de aplicación del artículo 155 a raíz del protocolo del aborto propuesto por García-Gallardo. Además, ha criticado la reducción de la partida provincializada para Soria en los Presupuestos Generales del Estado y el olvido en el proyecto del Corredor Atlántico. Mañueco ha denunciado el “turismo electoral” y la visita de la Ministra de Transportes haciendo “promesas que luego no cumplen”, lamentando las “insuficientes” ayudas al funcionamiento.
Sobre Belén Izquierdo, el presidente de la Junta ha asegurado que “no le asustan los retos”, ya que es “una mujer peleona, reivindicativa” y “una empresaria de éxito con una vocación de servicio público y compromiso con Soria”. Aquí, Mañueco ha aprovechado para resaltar el “cuidado” y “mimo” con el que el PP trata a los autónomos y empresarios, destacando también el apoyo de la Junta de Castilla y León al PEMA y a la proliferación de suelo industrial. “Una gran victoria del PP en las municipales nos va a permitir conquistar un futuro mejor para todas las personas de Soria y Castilla y León y haremos lo que hemos hecho siempre para ganar: trabajar, trabajar y trabajar”, ha concluido, entre los aplausos de los presentes, que se han puesto de nuevo en pie, arropando la consagración de una candidatura que busca poner fin a los 16 años en el Ayuntamiento de Carlos Martínez.