Autismo Soria explica a Soria Noticias los retos a los que se enfrentan hoy en día las personas con autismo y sus familias y por qué esta condición pasa más factura a las mujeres.
Este domingo 2 de abril es el día del Autismo, un trastorno que afecta a las interacciones de los pacientes con el mundo y las personas que las rodean. Según estimaciones de la OMS, afecta a 1 de cada 160 niños en todo el mundo que, en muchos casos, pasan desapercibidos. Nuria Santa Cruz, gerente de Autismo Soria, cuenta a Soria Noticias que este colectivo se enfrenta todavía a muchos retos por el desconocimiento de la sociedad general: “ojalá no tuviéramos que celebrar ya este día, eso querría decir que la gente es muy solidaria y hace un esfuerzo para entender a los demás”.
“Físicamente son un colectivo que no está marcado necesariamente por unas características físicas determinadas, como ocurre con otros colectivos, entonces suelen pasar muy desapercibidos”, apunta Santa Cruz. “Sus mayores dificultades están a la hora de comportarse por el tema de su conducta y comunicación, y si no les hacemos un hueco para que la gente los conozca y los comprenda, es muy difícil mejorar su situación”, destaca.
Hoy en día, los medios de comunicación, el arte y el cine siguen plasmando una figura de la persona autista estereotipada, basada en clichés “que no se ajusta para nada a la realidad”, lamenta la representante de Autismo Soria. Poco a poco, eso sí, todo “va avanzando”. El diagnóstico cada vez va siendo más temprano y en los controles de seguimiento que se realizan a los niños, se empiezan a hacer cribados de este tipo, aunque es muy importante ser capaz de detectar también el autismo en personas más mayores. “Muchos orientadores y profesores en los colegios e institutos cada vez se empiezan a hacer preguntas antes”, celebra.
Sin embargo, los diagnósticos todavía tienen una asignatura pendiente, porque las señales no se detectan con igual rapidez en hombres que en mujeres. “Las mujeres adultas, las chicas más mayores, son mucho más difíciles de ver cuando no hay una discapacidad intelectual asociada. Tienden a camuflarse mejor, a adaptarse por fuerza y a la fuerza. Que un chico ande solo no es raro, pero que una chica ande sola sí es raro, entonces se fuerzan mucho más a hacer cosas aunque no estén cómodas haciéndolas”, explica.
Santa Cruz apunta que para seguir trabajando para hacer frente a todos estos retos necesitan más apoyo del sector público. “En Autismo Soria somos ahora mismo 82 familias y ayudamos hasta donde llegamos con los medios que tenemos. Si algo tenemos que reclamar hoy es más financiación, porque atendemos a 3 veces más personas de las que atendíamos en 2019 y la financiación pública que tenemos es exactamente la misma”, lamenta.
Precisamente hoy, en el Día en el que reivindican con especial altavoz la importancia de que les entiendan, Soria ha celebrado su primera procesión con un tramo silencioso, para facilitar la inclusión de las personas hipersensibles en estos eventos; un pequeño gran regalo. Comenzando con la del Domingo de Ramos, la de la ‘Borriquilla’, la Asociación se encuentra a la espera de que el resto de Cofradías confirmen cuáles incluirán en sus procesiones estos tramos con el “menor ruido posible”. Aun así, celebra que cuando se encontraban marcando esta zona esta mañana, “la población según nos ha visto sabía y respetaba lo que estábamos haciendo”.
La sociedad soriana, dice Santa Cruz, se vuelca cada vez más con este colectivo. Este 2023, 44 edificios de la provincia se han “vestido de azul” en señal de solidaridad. A lo largo y ancho del territorio soriano, decenas de Ayuntamientos han lucido este distintivo, igual que ha sucedido en la capital, donde la Casa Consistorial, Diputación, Caja Rural u Hospital Latorre se han sumado también, entre otros tantos, a esta causa. En cuanto a los comercios, el año pasado contaron con más de 70 y este año han superado los 120 en la totalidad de provincia, traspasando las barreras de Soria y Almazán que les limitaron en 2022. Confían en que este día sea cada vez menos necesario aunque, mientras tanto, seguirán reivindicando su derecho a ser entendidos.