Con 4 candidaturas en disputa por el Ayuntamiento, el PP deberá ir con todo si quiere mantener su legado de 28 años en la alcaldía.
La actual alcaldesa de Ólvega, Elia Jiménez, se prepara para tratar de conseguir este 28M la mayoría absoluta que se le escapó en 2019. A pesar de que el municipio lleva casi tres décadas siendo una importante plaza popular en la provincia, la aparición de nuevos partidos en su estreno como candidata le obligó a pactar con Ciudadanos, que este 2023 se ha retirado de la puja política. La actual alcaldesa segura no saber “quién desviará el voto” de sus actuales socios de gobierno, y aunque está “abierta a trabajar con todos”, se niega a plantearse un pacto. Lo que no es descartable es que parte de las papeletas naranjas de hace 4 años pongan en problemas a la popular estos comicios. Parece que la entrada de Vox, de la mano de Pedro Calvo, obligará a Jiménez a ir con todo si quiere unificar a la derecha.
Montse Tello, secretaria general del PSOE en la localidad, lidera este 28M la candidatura de su partido al Ayuntamiento. La actual concejala quiere una Ólvega con mayor participación ciudadana y que sea más accesible para todos. Teniendo ella misma una discapacidad auditiva, ha denunciado “falta de empatía” del equipo de gobierno, por no haberle facilitado acceso en igualdad de condiciones a plenos y comisiones, aunque la alcaldesa defiende que sí se han tomado medidas. Esta legislatura, las agrupaciones en la oposición han estado relativamente de acuerdo y la lista conjunta integrada por Podemos, Izquierda Unida y Alianza Verde que lidera Mario Calonge buscará también destronar a los populares.
Aunque Ólvega sobrevivió ‘con honores’ al éxodo rural gracias al impulso industrial que propició Emiliano Revilla, es momento de plantearse cómo puede la Niña del Moncayo seguir creciendo cuando él no ejerza ya de embajador de sus polígonos. En este sentido, las candidatas coinciden: hay que aprovechar su legado. Además de “propiciar todas las ayudas posibles” para el asentamiento de industria, Tello no quiere olvidar la importancia de atraer empresas de menor envergadura y crear espacios de desarrollo para emprendedores. La actual alcaldesa defiende la importancia del contacto directo con sus responsables para entender cómo puede Ólvega ofrecerles todo lo que necesitan, por ejemplo, ampliando la oferta formativa del municipio.
Pero igual que hay que facilitar terreno industrial, la socialista considera que habría que hacerlo para la construcción de viviendas, cuya escasez es preocupante. La candidata del PP cree que la clave es colaborar con otras administraciones, no desatender la iniciativa privada y rehabilitar viviendas del centro.
Pero aunque el sector secundario permita a Ólvega ganar el pulso a la despoblación, el turismo sigue siendo su gran asignatura pendiente. La socialista cree que falta promoción y habría que explotar su patrimonio gastronómico y natural. Jiménez defiende que en estos 4 años se ha trabajado en señalización y posicionamiento online, y que la idea es tener una Oficina de Turismo en funcionamiento “a partir del año que viene”.
La contaminación ambiental ha opacado el desarrollo de Ólvega estos últimos años. Los vertidos industriales en el Queiles se saldaron con sanciones para los consistorios de Ágreda y Ólvega, que comparten depuradora. La alcaldable popular asegura que se están realizando controles “muy exhaustivos”, y para ello se creó una figura específica 3 años atrás. Sin embargo, también se registraron vertidos en años posteriores, a lo que responde que “está por determinar que sean solamente de Ólvega”, y que “siempre puede surgir un accidente”.
Tello reconoce que la corporación municipal “controla”, una alabanza que no hace extensiva al caso de Distiller y afea al Ayuntamiento que con esta empresa tenga “una venda puesta”. Por su parte, la actual alcaldesa mantiene que “es la Junta la que tiene competencia en materia de autorizaciones ambientales”. Descarta un control especial a Distiller y argumenta que “los malos olores” no tienen por qué ser “dañinos para la salud”, por lo que se va a centrar en “buscar” lo que sí lo sea y hacer que la empresa cumpla con la normativa.
La coalición de izquierdas ha presentado un programa integrado por más de 90 propuestas, entre las que se encuentran desde remunicipalizar los servicios privatizados cuando acaben las concesiones hasta apostar por el patrimonio cultural, histórico y natural del municipio. La vivienda municipal es otro de sus pilares y creen que es necesario escuchar y apoyar más a las asociaciones, ya que “el Consistorio olvegueño deja en sus hombros gran parte de las actividades que se realizan en el municipio”. La candidatura contempla también ferias de industria para generar nuevos espacios para empresarios y emprendedores y dar más voz a Muro, con asambleas abiertas y su demarcación como entidad menor gestionada como concejo abierto. Como novedad, contemplan el proyecto ‘Nuevos Espacios’, que conllevaría la adquisición y rehabilitación de la nave de la fábrica del Moncayo y la antigua factoría de pizzas y embutidos para la construcción de vivienda pública, oficinas, salas de formación, coworking o hasta espacios deportivos. Además, la coalición a cargo de Calonge incluye la renaturalización del espacio entre la avenida de Ágreda, La Loma y el antiguo matadero para crear una gran dehesa que sirva para pasear y unir la zona sur-sureste con el polígono industrial.
VOX presenta un programa basado en el lema del partido: “cuida lo tuyo”. La formación se plantea ayudar a las familias, ampliando la conciliación familiar laboral gracias al programa Conciliamos de la Junta, apoyando también a familias vulnerables. A ojos de Vox, también sería importante ampliar el cupo de pediatría para que no se centrara solo en revisiones a niños sanos. También pretenden impulsar la construcción de vivienda social para trabajadores con el tipo de fijar población en el municipio, ayudando también a la gente joven a conseguir su primera vivienda a través de los Planes de Vivienda de la Junta. Además, de alcanzar la alcaldía suprimirían la partida presupuestaria destinada a costear el sueldo del alcalde para destinarla a las asociaciones olvegueñas. “Nosotros no prometemos nada, solo prometemos trabajar para conseguirlo”, apunta Calvo. Sobre los pactos, estarían “abiertos a cualquier opción que sea buena para el pueblo” y el alcaldable no descarta ninguna agrupación.