Jesús Tamayo ha sido el primero en acercarse a asumir las recriminaciones de los aficionados.
Las peores pesadillas de todos los numantinos se han hecho realidad esta noche. El conjunto soriano ha firmado con una nueva derrota en casa su tercer descenso en cuatro años ante un Los Pajaritos con un gran ambiente. Más de 5.000 aficionados se han acercado al campo para tratar de empujar al equipo después de una temporada catastrófica pero nada ha salvado al barco rojillo del naufragio.
Por eso, al terminar el partido la afición no ha dudado en despedir al Numancia entre recriminaciones y gritos. Hoy en Los Pajaritos se han oído cánticos dirigidos a los jugadores, como "esta camiseta no la merecéis", "fuera" o hasta, con sorna, "esta noche de fiesta en el Bandalay". Además, también se ha escuchado "jugadores mercenarios" y "directiva dimisión".
Los futbolistas rojillos se han dado por aludidos y no han dudado en acudir a la grada y aguantar estoicos el chorreo de críticas de la afición. Jesús Tamayo ha sido el primero en acercarse a dar la cara, aunque pronto se le han unido el resto de sus compañeros entre lágrimas y abucheos.
Esto es lo que se ha vivido en Los Pajaritos al final del partido: