La lluvia convirtió en un caos el desfile del Lunes de Bailas, que no llegó a suspenderse, aunque respetó el resto de actos. Pujas nunca vistas por obras de arte sanjuaneras convertidas en botas o la primera novillera un Viernes de Toros, otras de las imágenes que ya forman parte de la historia.
Las Fiestas de San Juan 2023 son ya parte de la historia de la ciudad de Soria. Unos Sanjuanes que serán recordados (como todos) por cada uno de nosotros gracias a esos momentos de comunión, de encuentro, de amor y de pasión que cada cual, “como pueda o como quiera”, ha vivido durante estos 5 días con la pareja, la familia, los amigos o esos ‘simples’ conocidos que, en San Juan y entre miradas cómplices y abrazos sinceros, se convierten en compañeros.
Acaban cinco días tras los cuales a unos les duelen las plantas de los pies, después de quemar los pasos del reloj día tras día, y a otros la garganta de cantarse todas las sanjuaneras posibles. Algunos sufren dolor de labios, unos por el maldito plástico de los vasos y otros por no separase de las trompetas, y otros tienen cargados los gemelos por correr delante de los toros o por aguantar el ritmillo sanjuanero de las peñas. Con chaleco o de piñorra, en cuadrilla o con amigos, subastando o en las verbenas, al son de las gaitas o de las charangas, desafiando a la lluvia, haciendo las dianas o buscando resquicios para descansar; las fiestas tienen mil y un matices. Tocando en la Banda, repartiendo tajadas, limpiando la ciudad, sirviendo detrás de una barra, haciendo fotos, escribiendo las crónicas, poniendo las vallas, garantizando la seguridad, en las tiendas, en los hoteles, o atendiendo a los enfermos… son muchos, miles, los que sacan, literalmente, adelante las fiestas con el sudor de su frente.
Pero más allá de la experiencia individual de estas fiestas de San Juan 2023, quedará para el recuerdo colectivo la lluvia volviendo a hacer acto de presencia el Lunes de Bailas, pero esta vez antes de lo habitual. Una tremenda tormenta en la mañana del último día de Fiestas puso en jaque el desfile con los Santos de los barrios y este se hizo ‘como se pudo’, con tallas tapadas por plásticos, piñorras con paraguas y peñas desperdigadas. Unas peñas que, pese a alcanzar números difícilmente manejables, demuestran cada día estar más integradas –en las fiestas y entre sí– siendo un elemento sustancial de las mismas.
También llovió el Domingo de Calderas, pero por la tarde y tras los toros. Y ya lo había hecho en La Compra, con una granizada memorable que, milagrosamente, no impidió el festejo, aunque sí la merienda. La tormenta convirtió los Chiringuitos y Valonsadero en un barrizal con pocos sanjuaneros pero muy afortunados, pues solo ellos recordarán ese singular día durante muchos años. Sin duda, otra de las imágenes de las Fiestas será la de Estrella Magán, la primera novillera en lidiar un Viernes de Toros en Soria.
Una Saca lenta pero con 10 en La Chata o pujas de hasta 1.500€ son otras imágenes que nos dejan para la historia estas Fiestas de San Juan 2023. ¿Las revivimos juntos?