Se plantean pequeñas intervenciones en la helipista, donde se prevé la construcción de dos cubetos de retención bajo los depósitos existentes, la preinstalación de alumbrado en la zona de aterrizaje y la protección de incendios mediante SESR.
El presidente del Grupo Tragsa, Jesús Casas Conde, ha visitado esta mañana las obras de ampliación y mejora que se están llevando a cabo en la BRIF de Lubia. Durante su visita a las instalaciones ha estado acompañado por el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre Zubiri. Ambos han comprobado que las actuaciones van a buen ritmo.
El presidente de Grupo Tragsa, organismo del que dependen las Brigadas de Refuerzo contra Incendios Forestales, ha conocido de primera mano la evolución de las obras que se están llevando a cabo en la base de Lubia e, igualmente, ha departido con los trabajadores que allí se encuentran.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), está invirtiendo 4,3 millones de euros en la ampliación y modernización de las instalaciones de la BRIF de Soria. Se trata de una obra incluida dentro del ‘paquete de inversiones’ que el Ministerio tiene en marcha para renovar todas las bases de incendios que el Gobierno de España tiene distribuidas estratégicamente por la geografía nacional.
Así, el proyecto de modernización y ampliación de la BRIF de Lubia incluye la construcción de un nuevo edificio central para la base de incendios, así como dos edificios auxiliares (una nave para almacén y taller, y un comedor exterior cubierto). Además, la actuación contempla obras de adecuación de las instalaciones existentes, con intervenciones en la helipista. También se desarrollarán nuevos accesos para mejorar el funcionamiento con la nueva ubicación de uso, así como adecuarán los viales existentes.
El nuevo edificio para la base de incendios de la brigada forestal de Lubia se levanta en las inmediaciones del lugar que ocupa la actual base, que fue creada en 2007 y que ocupa una antigua casa forestal adaptada. La nueva edificación, de arquitectura moderna pero integrada en el entorno, contará con una superficie construida de 1.275 metros cuadrados y se desarrollará en dos plantas. De este modo, contará con salas de estar, comedores, cocinas, cuatro vestuarios, gimnasio, salas de estar, de formación, diez habitaciones, oficinas, salas de reuniones y terraza, distribuidos en los dos pisos.
Para conseguir la eficiencia energética, toda la envolvente utilizará un Sistema de Aislamiento Térmico Exterior (SATE). Además, en la cubierta se instalarán paneles solares y habrá una caldera de biomasa en el cuarto de instalaciones.
El proyecto incluye, además del nuevo edificio de la base BRIF propiamente dicha, dos construcciones auxiliares, un comedor exterior cubierto y una nave auxiliar para almacén y taller (almacén para pilotos, equipos de protección individual, maquinaria y un pequeño taller de mantenimiento para la misma).
La actuación de modernización y ampliación de la base BRIF de Lubia que ejecuta el Gobierno en Soria en estos momentos contempla también algunas obras de mejora y actualización de las instalaciones ya existentes. Así, se plantean pequeñas intervenciones en la helipista, donde se prevé la construcción de dos cubetos de retención bajo los depósitos existentes, la preinstalación de alumbrado en la zona de aterrizaje y la protección de incendios mediante SESR.
En la base de Lubia trabajan más de 60 efectivos apoyados con medios aéreos cuya labor es dar apoyo a los medios de extinción de las comunidades autónomas, dado que son las autonomías las que tienen las competencias en materia contra los incendios forestales. En 2022 se realizaron desde Lubia 72 intervenciones en 32 incendios forestales lo que implicó más de 460 horas de vuelo de los helicópteros.
En concreto, la BRIF de Lubia está compuesta por seis cuadrillas de ocho personas (seis bomberos forestales + un bombero correturnos + un capataz), es decir, 48 personas. A ellos hay que sumar dos capataces correturnos; tres técnicos de incendios que acompañan a cada dos cuadrillas (una Brigada); un jefe coordinador de técnicos; un preparador físico; dos emisoristas de base; una cocinera limpiadora para campamento de técnicos y pilotos; dos técnicos de base así como dos pilotos y un mecánico.
La empresa Tragsa es la encargada de poner el servicio de funcionamiento del dispositivo de extinción y prevención de incendios forestales con el fin de cubrir los medios humanos y materiales necesarios para ejecutar distintas acciones de extinción y prevención sobre el territorio en coordinación con las comunidades autónomas.
El objetivo es la ejecución del servicio para el funcionamiento del dispositivo de extinción y prevención de incendios forestales como apoyo a las comunidades autónomas en la extinción, prevención y análisis de incendios forestales compuesto por personal especializado en: la planificación de actuaciones preventivas, el manejo y comportamiento del fuego y en el análisis estratégico;
En concreto el servicio global puede dividirse, a su vez, en otros servicios: Servicio de apoyo a las comunidades autónomas para la extinción de incendios forestales realizado por las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) que, con un carácter integral, y muy apegadas al territorio, abordarán labores de extinción y/o de prevención.
En estos momentos existen 10 bases BRIF que se encuentran ubicadas en zonas de alto riesgo de incendio y/o de elevada riqueza forestal y que realizan los tres servicios señalados anteriormente de forma integral. Desde que, en junio de 1992, se pusieran en funcionamiento las dos primeras Brigadas de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) cuyas ubicaciones fueron: Pata del Caballo (Huelva) y Prado de los Esquiladores (Cuenca), el magnífico resultado de estas unidades motivó su ampliación hasta conformar el mapa actual de ubicaciones, añadiéndose progresivamente la BRIF de Pinofranqueado (Cáceres) y Tabuyo del Monte (León). En el año 1994 se creó una quinta unidad en Daroca (Zaragoza). Posteriormente se crearon las Brigadas de Laza (Orense), Tineo (Asturias), Puerto del Pico (Ávila), La Iglesuela (Toledo), Puntagorda (La Palma) y finalmente Lubia (Soria) en 2007. En 2004 la BRIF de Pata del Caballo se trasladó a La Almoraima (Cádiz) y en 2005 se eliminó llegando de esta forma a las diez unidades actuales.
Desde 2009 estas unidades trabajan prácticamente la totalidad del año, realizando trabajos complementarios para la extinción de incendios forestales en los periodos de menor riesgo de los mismos, tales como tratamientos selvícolas, quemas controladas, divulgación y concienciación ciudadana.