Ante la creciente preocupación social por el incremento de las adicciones sin sustancia, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades creará una red para abordar este desafío y captará personas referentes en estos ámbitos para lanzar el mensaje
El uso indebido e inusualmente frecuente de la tecnología ha venido a incluirse en las denominadas ‘adicciones sin sustancia’. La dependencia extrema de las redes sociales y el juego patológico por parte de los jóvenes se han convertido en una de las mayores preocupaciones de los padres. Y la última Encuesta sobre uso de drogas en Enseñanzas Secundarias en España (Estudes) refuerza esa inquietud: el uso compulsivo de internet ha aumentado un 4 %, pasando del 17 % en 2019 al 21,1 % en 2021. Un incremento aún más notable en los alumnos de 18 años, donde el crecimiento llegó al 10 %. La media nacional y la de la Comunidad se mueven en valores similares.
En este contexto, la Junta de Castilla y León ha presentado hoy la campaña de sensibilización a familias sobre redes sociales ‘Si se pierden en las redes, se pierden en la vida’, que se lanzará entre el 22 y el 31 de agosto en prensa, radio y perfiles oficiales de redes sociales. El objetivo es dar respuesta a una creciente preocupación social, puesto que los datos reflejan que la población joven es el colectivo más afectado por esta adicción.
Esta campaña forma parte de en un amplio conjunto de actuaciones digitales cuyo objetivo es la prevención de las adicciones tecnológicas y el juego con apuestas, cuya financiación en 2023 ha alcanzado 1,17 millones de euros, tres veces más que cuando se inició en 2019 (393.000 euros). Junto a la sensibilización e información acerca del problema, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades pondrá en marcha próximamente una ‘Red de Prevención de Redes Sociales’ junto al Consejo de la Juventud de Castilla y León para potenciar modelos de vida saludables frente al uso abusivo de pantallas, videojuegos y juegos online con apuestas, pero también se hará referencia al consumo de drogas legales e ilegales.
Para lograr los objetivos, se pretende captar referentes del mundo ‘gamer’, deportivo o de la moda, que sean ejemplo para los jóvenes y que ayuden a hacerles llegar el mensaje. Junto a esto, se creará un sello de calidad en redes para identificar el compromiso de la Junta con la prevención de las adicciones y la promoción de la salud. Para ello, se crearán también perfiles en las plataformas más utilizadas, como Tik-tok o Instagram, para difundir información veraz acerca de los malos hábitos a evitar.
Uso problemático de las nuevas tecnologías en Castilla y León
Si bien el uso compulsivo de internet entre jóvenes castellanos y leoneses se encuentra en torno a una décima por debajo de la media nacional, es un problema que afecta al 21 % de los estudiantes de entre 14 y 18 años, según los datos de la encuesta Estudes. Ahora bien, en cuanto al uso conflictivo de videojuegos, la Comunidad se mueve en números similares al conjunto del país, en torno al 6,9 %. Además, el 59 % de los alumnos reconoce jugar diariamente y, en lo que respecta a juego online con dinero, los valores se sitúan en valores semejantes a los nacionales: un 3 % asume conductas problemáticas, lo que supone un ligero incremento respecto de la última encuesta. La nota positiva se ubica en los juegos de azar presenciales, que ha disminuido 5 puntos.
Todos estos datos se reflejan en los tres comportamientos entendidos como los más característicos de los jóvenes con problemas de adicciones sin sustancia: juego patológico o trastorno por juegos de azar; trastorno por juegos digitales, videojuegos o juegos por internet; y uso problemático de la web, redes sociales, pantallas digitales y tecnologías de la información y la comunicación.
Más acciones de futuro
La campaña de sensibilización, la creación de la ‘Red de Prevención’, el sello de calidad y los perfiles informativos forman parte de las actuaciones incluidas en las acciones de prevención del futuro VIII Plan Autonómico de Adicciones. De este modo, también se trabajará en esta dirección en cuanto al consumo de sustancias estupefacientes, dentro de la ‘Red de planes locales de drogas de Castilla y León’. Se ahondará en la prevención de manera selectiva con menores en riesgo, actuación que deberá estar recogida en los planes locales, los cuales serán financiados por la Junta. Labor que se extenderá a centros de menores tutelados con jóvenes de entre 15 y 18 años.
En lo que respecta a la intervención directa, los servicios territoriales de referencia en cada provincia irán incorporando progresivamente la atención personalizada a menores y familias donde exista una percepción contrastada de uso problemático de tecnología o juego online. Y, además, se van a elaborar protocolos de coordinación para los casos que presentan este tipo de problemas de manera asociada a otros trastornos de salud mental. Ligado con esto, se trabajará en protocolos de derivación de casos desde los diferentes sistemas −red de planes de drogas y adicciones, educación, menores, sanidad− hacia programas específicos de apoyo al tratamiento.
En cuanto a la formación y de cara a 2024, los profesionales de Servicios Sociales que trabajan en prevención e intervención en utilización problemática de redes sociales, videojuegos y juego con dinero, recibirán cursos de capacitación para mejorar sus facultades profesionales.
Actuaciones desarrolladas
En los últimos años, el Comisionado Regional para la Droga de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades ha trabajado en diferentes líneas plasmadas en programas específicos dirigidos a jóvenes. Junto con la Consejería de Educación, se inició una acción coordinada en 2019 que se ha prolongado hasta este año y que se ha centrado en las adicciones sin sustancia. Unos programas que han supuesto 1,17 millones de euros del presupuesto de Familia en 2023.
Junto a la línea de financiación, dotada de 100.000 euros, destinada a las corporaciones locales para la realización de programas de sensibilización, información y prevención en esta materia, se han incorporado sesiones específicas sobre mal uso tecnológico y juego online a los programas de la Junta en materia de drogas, como ‘Moneo’, ‘Dédalo’ y ‘Educar en familia’, lo que ha servido para una detección precoz del problema. Ello ha ido acompañado de la realización de charlas, talleres y material divulgativo.
Además, se han llevado a cabo campañas con adolescentes y sus familias en colaboración con la Asociación de Jugadores Patológicos Rehabilitados y de distintas universidades, en las que han participado alrededor de 1.600 padres y madres, además de lanzar mensajes de manera directa mediante el plan de medios.
En cuanto a labores de asistencia, se han venido impulsando programas como ‘Nexus’, ‘¿Te apuntas?’, ‘¿Vivir el momento?’ o ‘Pértiga’, de carácter extraescolar y a través de los cuales se han reforzado las intervenciones universales en niños de entre 9 y 14 años. Junto a estos, se ha desarrollado la iniciativa ‘Construyendo mi futuro’, mediante la que se realizan intervenciones selectivas e individuales con adolescentes que tienen mayores factores de riesgo. En todos estos programas han participado 5.719 jóvenes.
En este contexto, también se han puesto en marcha programas de intervención indicada, en los que equipos integrados por psicólogos y trabajadores y educadores sociales trabajan con jóvenes con diversos problemas, como las adicciones sin sustancia, el abuso de drogas, inadaptaciones familiares y sociales, fracaso escolar, problemas de autocontrol y trastornos del comportamiento.
En lo que tiene que ver con la formación, se ha fomentado la especialización de 439 mediadores, jóvenes voluntarios y profesionales implicados en programas de prevención y tratamiento, para que puedan hacer frente a los problemas que se presentan de un modo más eficaz.
Por último, cabe señalar la progresiva mejora de los sistemas de información sobre las adicciones sin sustancia en cuanto a la detección de drogodependientes que también presentan trastornos por juego patológico −23 casos−, la profundización en el análisis de datos nacionales en perspectiva autonómica y la inclusión de nuevos indicadores para implementar estudios más completos, como el de admisión a tratamiento ambulatorio por sufrir el citado trastorno por juego patológico.