Pero las máximas caen de forma notable.
Soria se despide, momentáneamente de las lluvias, y la información meteorológica anuncia un miércoles estable en cuanto a lo atmosférico en la provincia. Desaparece por tanto el riesgo de tormentas y, aunque en el cielo se alternarán nubes y claros, lucirá el sol durante la mayor parte de la jornada.
Eso sí, las temperaturas no ascenderán ya con la fuerza de días atrás. Las máximas no superarán los 22 grados en las horas centrales del día y las mínimas también caerán para quedarse en el entorno de los 10 positivos.
Esto llega como consecuencia de un cambio en el viento, que soplará de componente norte y alcanzará velocidades de 15 kilómetros por hora.