El Ayuntamiento se alía con el CAEP en la recogida de ropa y de material de abrigo para ayudar a los damnificados por el terremoto.
Tres furgonetas cargadas hasta los topes de ropa y de mantas, además de otros enseres sobre todo para combatir las inclemencias meteorológicas, llevan recogidas en Tardelcuende. La localidad del Izana se ha volcado en la ayuda hacia los damnificados por el terremoto que asolaba el pasado 8 de septiembre la región marroquí de la cordillera del Atlas y que ha causado miles de muertos y de desaparecidos.
El alcade tardelcondino, Ricardo Corredor, ha explicado que la semana pasada ya barajaron brindar ayuda por parte del municipio, contemplando en principio la aportación económica. Sin embargo, vieron que la "mejor opción" es la que brindan en el CAEP de Soria, donde han dispuesto dependencias para llevar a cabo el acopio, sobre todo de material de abrigo, aunque también se admiten alimentos enlatados (no en cristal).
El regidor ha descatado la "inmensa solidaridad" que demuestran sus vecinos, toda vez que el viernes ya se decidió por sumarse a la iniciativa del centro deportivo soriano, en vez de abrir una cuenta bancaria y remitir los fondos recaudados a una ONG de aquel país. El llamamiento ha movido la sensibilidad del vecindario, que ha acudido de manera contundente al consistorio para aportar su ayuda material para atenuar este desastre.
Según ha indicado Corredor, su municipio alberga a "cerca de una treintena de marroquíes", quienes son vecinos y viven el día a día en la localidad trabajando en el sector de la resina. Aunque ninguno de ellos, según ha relatado este martes, ha tenido que lamentar desgracias personales en sus respectivas familias, sí que han notado el apoyo de quienes comparten la vida en la localidad. "Han sido rebasadas las previsiones más optimistas", ha referido el regidor, quien por otro lado, ha señalado que el ayuntamiento "sigue abierto" a esta recogida humanitaria "hasta cuando sea". La afluencia ha sido notoria estos dos últimos días con el resultado ya mencionado.
"En principio estamos enviando ropa de abrigo y mantas, sobre todo, porque nos dicen que la alimentación no es una de las prioridades más urgentes ya que allí hay huertos y alimentos con los que seguir adelante", ha descrito.
Las instalaciones del CAEP continúan también abiertas para la recogida. Allí canalizan las donaciones que también incluyen material higiénico, para ser enviadas con premura antes de la llegada de las bajas temperaturas que se prodigan concluido el verano en la zona devastada: