Artículo de opinión de Vanessa García, procuradora de Soria ¡YA!
Comienza octubre y tomo el testigo a Silvia Largo, que hasta septiembre firmaba esta columna como integrante de Soria ¡YA!, y a quien envío un abrazo. Soy Vanessa García, y desde el 13 de febrero de 2022 tengo el honor y la responsabilidad de llevar la voz de la provincia de Soria a las Cortes de Castilla y León, junto a Ángel Ceña y Juan Antonio Palomar, como procuradora autonómica.
Llegué a Soria ¡YA! tras el llamamiento que hicieron los Goyos en una entrevista publicada en este periódico en noviembre de 2017. En aquellos días la Plataforma atravesaba una situación límite, y un puñado de supervivientes remaban a duras penas para que no se terminara de hundir. Estaban muy solos y necesitaban ayuda.
Acepté el desafío que lanzaron Goyo Sanz y Goyo Alonso: comprometerse con el futuro de Soria. Tengo mil razones para luchar por una provincia de la que me fui con 18 años y a la que volví, en la que siempre he querido quedarme. Qué mejor que hacerlo en Soria ¡YA!, en un colectivo nacido de la unión de la sociedad civil como reacción al olvido y abandono institucional.
La reivindicación no es un camino fácil. Lo complican los incumplimientos y mentiras constantes de políticos e instituciones, la lentitud, las paralizaciones, los retrasos, las cancelaciones, los recortes,... Palos en la rueda que hacen mella en el ánimo, abren grietas.
Dos décadas de lucha después, por esas grietas se han ido integrantes. Algunos salieron de Soria ¡YA! porque consideraron que ya no podían aportar más. Hubo quien sintió que los objetivos por los que entró en la Plataforma se cumplieron. Causas familiares o de fuerza mayor, cansancio, decepciones, desacuerdos,... Cada persona que se marchó tenía sus motivos, pero todas dejaron huella.
A lo largo de la historia de la Plataforma ha habido integrantes que se fueron, sí, pero también se unieron otras personas. Un viaje de ida y vuelta normal en un movimiento formado por ciudadanos comprometidos que dan parte de su tiempo, con corazón y cabeza, por una causa justa.
Así que en Soria ¡YA! todos estamos de paso. Trashumantes. Porque como dice Jorge Drexler en su canción Movimiento: Si quieres que algo se muera, déjalo quieto.