Fernández Mañueco anuncia que se esta elaborando una nueva Ley de Infancia para profundizar en los colectivos más vulnerables.
Este viernes en Salamanca, el presidente de la Junta Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha participado en la sexta edición del Think Tank de Asecal. Durante su intervención, ha destacado que la tasa de pobreza infantil en Castilla y León ha bajado 3 puntos este año, casi 6 puntos por debajo de la media nacional, siendo una de las comunidades con menor tasa de niños en privación material severa.
Para seguir avanzando en la lucha contra la pobreza infantil, la Junta destina 60 millones de euros anuales a este fin. Además, se ha implantado el Servicio de Ayuda a Domicilio para menores vulnerables, con personal de apoyo y refuerzo educativo y social; y se está elaborando una nueva Ley de Infancia para profundizar en la protección de menores vulnerables.
Castilla y León es la comunidad de régimen común con mejores servicios sociales y la que tiene el sistema educativo más avanzado de España. El objetivo con estos esfuerzos es seguir estando a la vanguardia de la calidad y equidad educativa, y también de la protección de menores.
Desde el Ejecutivo autonómico se garantiza un sistema educativo de máxima calidad y equidad, innovador e inclusivo, con bajos índices de segregación y buen clima de convivencia escolar.
Fernández Mañueco ha reconocido que gran parte del mérito la tiene la comunidad educativa, con excelentes profesionales de diferentes ámbitos, y también una clara voluntad política del Gobierno de Castilla y León, que considera la Educación como herramienta de transformación y de igualdad de oportunidades.
Siguiendo esta pauta, es fundamental que la Administración garantice el refuerzo a todos aquellos que lo necesiten. Así lo hace la Junta de Castilla y León con el Programa de Éxito Educativo, con una red de centros en todo el territorio que ofrece clases de refuerzo durante el curso y en verano; o a través de ayudas que pueden suponer un ahorro de hasta 3.000 euros por alumno, con índices correctores para colectivos desfavorecidos y para el medio rural.
A esto hay que añadir los avances que se han seguido impulsando en el curso que acaba de comenzar, como el incremento de las Unidades de Acompañamiento y Orientación, que trabajan para prevenir el absentismo escolar; o un nuevo programa para llevar actividades extraescolares a las zonas rurales y a los barrios más vulnerables, del que se beneficiarán 1.600 alumnos en 80 centros.