Yolanda De Gregorio ha confirmado en el discurso de clausura que Soria volverá acoger la III edición de este evento el próximo año.
Soria se ha convertido durante los dos últimos días en el epicentro nacional de la bioeconomía con el II Foro de Castilla y León. A lo largo de estas jornadas, el Palacio de la Audiencia ha acogido a 64 ponentes, 36 empresas y a más de 200 personas llegadas de todas las partes del país.
Tras numerosas conferencias y mesas de trabajo, el presidente de la Diputación, Benito Serrano y la delegada de la Junta, Yolanda de Gregorio, han sido los encargados de clausurar esta edición. En ese sentido, el máximo representante provincial ha recalcado que este “es un modelo de éxito y de orgullo para todos los sorianos”.
Incidiendo en que es fundamental el apoyo administrativo para impulsar estos proyectos de economía circular, ha repasado diversos proyectos que se ubican en el territorio soriano relacionados con este sector. A tal efecto, ha enumerado la planta eléctrica renovable de Garray, la cooperativa de Copiso o la apuesta por la construcción de casas de madera “que pone en auge a nuestros bosques”.
“Somos un exponente claro de aprovechamiento de la superficie forestal. Es una gran herencia de nuestros antepasados que debemos de seguir cuidando, convirtiéndola al mismo tiempo en un motor”, ha finalizado.
Por su parte, Yolanda De Gregorio ha tomado la palabra para confirmar que el próximo año Soria celebrará la III edición de este Foro, “ya que la Junta ha destinado una partida para que sea posible”. En esa dirección, la delegada ha recalcado que este acto “posiciona a la provincia y a la Comunidad como referentes en bieconomía”, a la vez que sirve para generar puestos de trabajo y para luchar contra el cambio climático.
“Queremos invertir más en I+D+I. Tenemos como objetivos crear casas más sostenibles, fomentar una mejor alimentación y gestionar los residuos de forma circulatoria. En definitiva, sentar las bases de una región más competitiva”, ha expresado.
Por último, ha citado ejemplos que acercan a Soria a ese reto como la planta de hidrógeno verde en el PEMA, el paso para formar parte del accionariado Gira Wind o el consolidarse como la segunda provincia que más energía eólica produce en Castilla y León, solo por detrás de Burgos.