De los 41 reconocimientos para toda España, 14 han sido para centros de Castilla y León.
La Consejería de Educación ha conseguido recientemente varios reconocimientos nacionales a la labor desarrollada por los centros educativos en materia de lectura. Así, de los 41 galardones que ha otorgado el Ministerio de Educación y Formación Profesional a los mejores clubes de lectura escolares en el curso 2022-2023, 14 se ubican en Castilla y León.
Uno de ellos es el Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) 'Pico Frentes', en Soria capital, que ha obtenido el reconocimiento el tercer premio en la modalidad B, categoría 2.
En la modalidad A, categoría 1 –municipios de menos de 5.000 habitantes–, han conseguido un segundo premio los centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP) ‘Tierra de Pinares’ de Mojados, en Valladolid; y ‘Comarcal Benito León’ de Santa María del Páramo, en León; y un tercer premio el Colegio Rural Agrupado (CRA) ‘Padre Hoyos’ de Torrelobatón, en Valladolid.
En la categoría 2 –municipios de más de 5.000 habitantes–, el CEIP ‘Navaliegos’ de Ponferrada, en León, se ha alzado con un segundo premio y los CEIP ‘Generación del 27’ de Villablino, ‘Teodoro Martínez Gadañón’ de San Andrés de Rabanedo y Fundación educativa franciscanas ‘Ana Mogas’, todos de León, con un tercer premio.
Decir que en el apartado en el que era galardonado el centro soriano, también han conseguido, en categoría 1, ser premiados el Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) de Sahagún, en León, y el ‘Tierra de Alvargonzález’ de Quintanar de la Sierra, en Burgos. Finalmente, en la categoría 2, ha sido galardonados con un segundo premio los IES ‘Obispo Argüelles’ de Villablino e IES ‘Virgen de la Encina’ de Ponferrada, ambos en León; y un tercer premio para el Colegio de Educación Especial (CEE) ‘Ntra. Sra. del Sagrado Corazón’ de León y el IES ‘Maestro Haedo’ de Zamora.
Los proyectos galardonados son testimonio del potencial que poseen los clubes de lectura escolares como elemento destacado para el fomento de la lectura, no solo entre el alumnado, sino entre todos los miembros de la comunidad educativa. Igualmente, se demuestra su importancia como factor dinamizador de las actividades que irradian desde la biblioteca escolar.