Lo que empezó como una actividad extraescolar se ha convertido en un club que no ha parado de crecer con el paso de los años. Actualmente, cuenta con 4 categorías y 30 niños.
Para conocer la historia del C.D. Patinaje Camaretas hay que retroceder varios años atrás. En 2015, el presidente y fundador de la entidad, Iván Cubero, animado por su amor hacia el deporte, decidió ofrecer una alternativa a todas aquellas niñas que terminaban la extraescolar de patinaje y no encontraban dónde seguir con su pasión.
Al observar que existía esa necesidad en la provincia, este soriano decidió crear un equipo de hockey patines. “Al final, no le puede gustar el fútbol a todo el mundo. Así que aposté por transformar lo que era una actividad en un club”, manifiesta. Aunque al principio estaba más enfocado a niñas, el Camaretas fue abriendo sus fronteras, enrolando en sus filas a niños de Golmayo, Soria, El Burgo, Almazán o Berlanga de Duero, entre otras muchas localidades. De esa forma, la iniciativa de Iván Cubero pasó de contar con 5 jóvenes en sus inicios hace 9 temporadas, a los 30 que hay actualmente.
Debido a este crecimiento, componen la escuadra balaguera en estos momentos cuatro conjuntos de edades diferentes (desde los 5 a los 16 años) que militan en la Liga Provincial de Soria: prebenjamín, benjamín, alevín e infantil. Iván Cubero es también uno de los propulsores de la competición. Ante este incremento de jugadores, la escuadra de Camaretas apostó por contratar dos entrenadores de nivel nacional como Jorge Reglero y César Reglero, dos apasionados del hockey patines.
El primero de ellos cumple su segunda temporada al frente de la nave naranja. Tras toda una vida ligada a esta práctica, como jugador del Numancia y del Laguna Negra, conjunto en el que sigue militando, el pequeño de los hermanos Reglero decidió dar el salto a los banquillos en el año 2021.
Al frente del infantil y del alevín, el técnico se ha centrado desde entonces en “ayudar a que mis jugadores evolucionen como equipo, y a que vayan mejorando en todos los aspectos”. En ese sentido, el preparador soriano apunta que lo más difícil de esta tarea “es que te hagan caso, ya que cuando empiezan, piensan que con saber coger el stick ya van a meter goles por la escuadra”. En su caso, César, que también ejerce como árbitro desde los 16 años, hace hincapié en que sus entrenamientos se basan en “perfeccionar” técnicas de patinaje relacionadas con los giros, los derrapes, los cambios de velocidad o los frenos a través de juegos amenos y divertidos.
De esa manera, ambos entrenadores y el presidente del C.D. Patinaje Camaretas buscan el principal objetivo de la entidad: el disfrute de los jugadores. “Nos gusta transmitir que lo más importante es que se lo pasen bien. Siempre habrá tiempo para lograr triunfos, pero con 6 años no les podemos pedir que compitan todas las semanas. A esa edad, tienen que entrenar y luego ya se verá”, manifiesta Cubero. Prueba de que están consiguiendo su reto, es que en los últimos tres años no ha parado de incrementarse el número de fichas del club.
Martina Frías y Alicia Unamuno son dos de las jugadoras que se han incorporado recientemente al conjunto soriano. A sus 12 años, la joven Martina Frías cumple su segunda campaña en la escuadra de Golmayo. En ese tiempo, la integrante del alevín manifiesta haber mejorado “mucho a la hora de regatear y de dejar a un lado mi miedo a recibir pelotazos”. En su caso, Unamuno, que ejerce desde el curso pasado como jugadora y portera en el benjamín a sus 10 años, se muestra muy contenta por las cualidades que ha adquirido para detener las pastillas: “Hay que mirar siempre a la bola. Antes cuando me estiraba para parar me caía, ahora soy una arquera mucho más veloz”.
Ilusionada y motivada a partes iguales por esos avances en su juego, esta última también explica lo que supone para ella defender los colores del equipo de su pueblo, recalcando que “es muy bonito poder hacerlo delante de mi familia y de mis amigos. Nunca me olvidaré del día que vinieron por primera vez mis abuelos a verme”.
Así, ambas jugadoras quieren seguir creciendo en un cuadro que no se pone techo. Precisamente, basándose en el trabajo de cantera como piedra filosofal del proyecto, Iván Cubero no descarta crear un combinado sénior a largo plazo. No obstante, por ahora su intención es centrarse en unas categorías en las que el disfrute y el aprendizaje son los objetivos fundamentales que persigue el Club Deportivo Patinaje Camaretas.