Será el regreso de la Superliga Masculina de Voleibol en 2024 a Los Pajaritos.
Este sábado 6 de enero, tradicional día de Reyes, a las 19.30 horas se torna también en deportivo. El partido en Los Pajaritos entre Grupo Herce Soria y Arenal Emevé Lugo se antoja un plan perfecto para la tarde de Reyes, con un gran espectáculo deportivo a precios asequibles y resguardado de la lluvia y el frío.
La clasificación dice que hay una gran diferencia entre ambos contendientes, con los sorianos optando a dormir en el liderato y los lucenses en plena batalla por eludir los puestos de descenso. Pero los datos y números sobre el papel o la pantalla no marcan las diferencias que, sin duda, la cancha se encarga de igualar. En primer lugar, porque los gallegos ya demostraron en el encuentro de ida de la competición que son un equipo que no da facilidades y, por otro lado, porque los sorianos ya saben lo que cuesta ganar a cualquier rival de la Superliga.
Y pese a todo, el partido es de una gran importancia. Para Lugo, como no puede ser de otra forma, porque cada punto que se araña es fundamental para mantener la categoría. Y para los celestes, porque en una competición tan igualada no hay margen de error. De hecho, los próximos rivales de los de Alberto Toribio en la competición doméstica serán Guaguas, Melilla y Teruel, por lo que dejarse puntos significa que recuperarlos será una misión de máxima dificultad. Además, el equipo celeste necesita recuperar el ritmo de competición después del parón de Navidad y antes de abordar los cuartos de final de la Copa CEV ante el Izmir turco.
Entre los protagonistas habrá una baja para los sorianos, la del receptor Luke Belda por una fractura en uno de los huesos de su mano izquierda. Toribio no podrá, por tanto, aprovechar su poderoso saque, un arma importante capaz de desatascar encuentros equilibrados. No obstante, el resto de efectivos tratará de poner todo de su parte para recibir al 2024 con una victoria. Mismo objetivo en el otro lado de la red, en un equipo con jugadores de gran solvencia, algunos de ellos con pasado celeste como el receptor Víctor Bouza o el central Juan Francisco Frías quienes, impulsados por el talento ofensivo del opuesto José Luis Linares, tratarán de liderar a los suyos en una cancha que conocen bien.