Su entrenador hace hincapié en que ha sido fundamental mantener el bloque tras quedarse a las puertas de la gloria el curso pasado. No obstante, mantiene los pies en los suelos y aboga por ir día a día para conseguir algo que “sería muy importante para toda la ciudad”.
El C.D. San José femenino es uno de los equipos sorianos que se está acostumbrando a estar arriba en los últimos años. Tras quedarse a las puertas del ascenso a Liga Nacional el curso pasado en la penúltima jornada, la entidad hizo un importante esfuerzo por mantener un bloque que no ha parado de crecer con el paso de las campañas en la Liga Gonalpi.
En esa tesitura, la continuidad de su míster, Hugo Palomar, fue clave para continuar soñando con un ascenso que sería histórico. Al término de la primera vuelta y con dos jornadas disputadas de la segunda, las colegialas marchan en la primera posición con 43 puntos, 5 por encima de un Real Valladolid que marcha en la segunda plaza.
“Hacemos un balance muy positivo de este tramo de la competición. No obstante, debemos de seguir pensando en nosotras mismas. Tenemos que continuar demostrando que somos un equipo fuerte”, manifiesta Palomar.
Las sorianas han llegado a esta posición de privilegio gracias a unos espectaculares números. En lo que llevamos de curso, se han mostrado como un combinado temible en ataque, con 69 goles a favor. De la misma forma, se han presentado como un bloque muy sólido en tareas defensivas, recibiendo únicamente 6 tantos en contra. En definitiva, estas fortalezas les han llevado a sumar 14 victorias, 1 empate y 1 derrota.
Respecto al primero de los aspectos, Palomar hace hincapié en que es muy importante “contar con muchas jugadoras que sean capaces de hacer gol; el año pasado terminamos con 18 futbolistas que lograron por lo menos un tanto y este curso ya tenemos a 15”. Por otra parte, tampoco se quiere olvidar de la fortaleza del vestuario para alcanzar estos dígitos: “Somos una familia. No es nada fácil ser el San José de Soria y luchar cada año por el ascenso ante potencias de Castilla y León. Estamos buscando la suerte que no tuvimos el pasado año”.
Buscando esos objetivos en su trabajo diario, el entrenador de las sorianas tiene claro que febrero “va a ser un mes clave”. Durante las próximas semanas, las verdiblancas se van a medir a rivales directos por el ascenso como el Real Valladolid y el Zamora: “Van a marcar mucho el devenir de la clasificación”.
El San José quiere dejar a un lado lo que paso el año pasado, eso sí, obteniendo un aprendizaje de aquella situación. Conscientes del poderío de las rivales, las sorianas están centradas en trabajar en cada entrenamiento, sin pensar más allá: “Hasta que las matemáticas no lo digan, no vamos a dar nada por hecho. Cada encuentro tiene que ser un nuevo desafío. Si podemos celebrar algo lo haremos y sino lo volveremos a intentar porque este equipo está preparado para dar el salto en cualquier momento”.
En ese proceso de crecimiento, el club ha cimentado muy bien su base, creando hasta 4 equipos femeninos que cuentan en estos momentos con más de 80 jugadoras. Junta a ellas, también cabe destacar a una afición que cada vez es más abundante en el Antiguo Los Pajaritos: “Les necesitamos. Es un evento muy importante para la entidad y para toda la ciudad. Sería algo muy bonito contar con un equipo femenino en categoría nacional”.
Con esos ánimos, las verdiblancas continuarán esforzándose para regalar a todos los sorianos un ascenso que sería histórico a Liga Nacional (cuarta categoría).