Las dos intervenciones, en el centro social y la plaza de la Cosa, movilizarán más de 400.000 euros.
Las próximas semanas serán intensas en San Pedro Manrique, pues la localidad de las Tierras Altas sorianas afronta dos importantes obras que están "a punto de comenzar". Así lo asegura José Ignacio Calleja, teniente de alcalde San Pedro Manrique, que concreta en declaraciones para Soria Noticias que ambas movilizarán más de 400.000 euros.
La primera de estas intervenciones servirá para llevar a cabo una rehabilitación completa en el centro social de la localidad. Con un presupuesto de unos 250.000 euros, se pretende la adecuación del inmueble a las nuevas exigencias en materia de eficiencia energética. Se incluye, entre otros aspectos, la sustitución de la caldera actual por otra más eficiente de pellets, el aislamiento de paredes y techo y el cambio de ventanas.
La intervención, ya adjudicada, tiene un plazo de ejecución de dos meses y medio por lo que "deberá estar concluida antes del final del mes de mayo", puntualiza el teniente de alcalde. Calleja aclara que la zona que se emplea actualmente como bar-restaurante "no verá alteradas sus rutinas" ya que el proyecto se centra principalmente en el espacio que incluye el salón y el área multiusos, que servía habitualmente para acoger actividades lúdicas.
La segunda de las intervenciones mejorará la accesibilidad de la plaza de la Cosa. Enmarcada dentro del plan 'Tu próxima compra inteligente' de la Mancomunidad de Tierras Altas, cuenta con un presupuesto de 153.000 euros y tiene como objetivo el acondicionamiento del centro neurálgico de la localidad, donde se concentran bares, restaurante, hotel, entidad financiera, supermercado y ferias temporales entre otras actividades.
Esta obra, "más aparatosa, pero mucho más sencilla que la anterior", también tiene previsto arrancar a corto plazo. Está ya adjudicada y tiene un plazo de ejecución de seis semanas. En el proyecto se definen las obras, que hacen referencia a la pavimentación de una superficie de la plaza, actualmente empedrada de 900 m2, y a la sustitución de la red de abastecimiento de agua, debido a la necesidad de demolición de las aceras actuales.
José Ignacio Calleja refiere que la intención es "igualar los niveles existentes" para que el acceso de personas mayores y con movilidad reducida sea mucho más sencillo. Esto, además, posibilitará al pueblo "disponer de un espacio mucho más bonito y acorde a los tiempos que nos dará también mucha más libertad de acción".