El proyecto de las márgenes del río Ucero cumplió su labor de protección frente a inundaciones y ha dotado a la localidad de una nueva zona deportiva y de ocio. En los últimos tiempos se han añadido pistas deportivas y una nueva pasarela peatonal que conecta las dos orillas.
El proyecto de la restauración de las márgenes del río Ucero a su paso por El Burgo de Osma cumple estos meses 15 años; un tiempo en el que, no solo se ha logrado proteger a la zona de la Serna de las inundaciones que sufría frecuentemente, sino también, dotar a la población de un amplio paraje para el esparcimiento. Donde antes se acumulaban residuos arrastrados por el río ahora hay cientos de metros de caminos con iluminación, bancos, pistas de baloncesto, vóley, fútbol, parque canino, huertos municipales, zona de calistenia y circuito para pump track.
En el 2007, la Confederación Hidrográfica del Duero presentó este proyecto de la mano de su entonces presidente Antonio Gato con un presupuesto de 850.000 euros en su primera fase. El setenta por ciento lo financió el organismo de la cuenca y el 30 por ciento restante la Junta de Castilla y León. El coste total del proyecto inicial ascendía a 1.131.364 euros, pero desde la Confederación se aconsejó al Ayuntamiento burgense a rebajar sus pretensiones para hacerlo elegible para los fondos Feder.
En su origen, el proyecto de las márgenes actuó sobre aproximadamente 700 metros aguas arriba del puente de la antigua nacional 122 con dos objetivos fundamentales: impedir que los desbordamientos del río provocaran inundaciones en las zonas habitadas próximas al cauce y mantener y promover el espacio natural del ecosistema fluvial para su uso público. La intervención se llevó a cabo mediante una serie de actuaciones que pasaron por las obras de defensa frente a avenidas, la mejora del entorno próximo al cauce, la adecuación ambiental de las riberas y la consolidación del entorno.
Las obras de defensa crearon barreras de escasa altura para impedir la inundación de la zona de las márgenes. La mejora del entorno se logró retirando las escombreras y los residuos existentes en la zona. La adecuación ambiental de las riberas fue posible habilitando zonas verdes y caminos peatonales junto al río para así fomentar el uso social de la zona. La consolidación del entorno se alcanzó con la plantación de especies arbustivas y arbóreas de ribera.
Esa primara fase se ejecutó en el marco del convenio firmado entre la Confederación Hidrográfica del Duero y la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León como desarrollo de los programas operativos integrados para la ejecución de actuaciones susceptibles de financiación europea.
La segunda fase de los trabajos se adjudicó en noviembre de 2008 a la Unión Temporal de Empresas formada por Nivelaciones y Desmontes Esama y Electricidad Frentes por 265.740 euros más Iva. En esa ocasión fue el Ayuntamiento burgense quién licitó la intervención con un plazo de ejecución de seis meses.
Aspectos como la iluminación o el mobiliario urbano formaron parte de esta fase en la que también se incluyó una escalera que conectaba las márgenes con la pasarela peatonal sobre el Ucero ahora reconvertida en una rampa para facilitar la accesibilidad. También en esa intervención se conectó la parte de los paseos recién creada aguas arriba de la carretera con la conocida como paseo de las Murallas, se logró abriendo un acceso bajo el puente a la altura del canal que permanecía sin agua.
Gracias a este proyecto, los vecinos de La Serna no han sufrido inundaciones en sus casas por las crecidas del río Ucero como las que se han registrado en las últimas semanas. Además, la población ha ganado una zona con increíbles vistas y en plena naturaleza apenas a unos pasos del casco histórico. Con el paso del tiempo, las márgenes del Ucero van ganando protagonismo en El Burgo ofreciendo no solo una gran red de caminos para pasear sino también pistas deportivas de fútbol, vóley y la de baloncesto que se ha asfaltado recientemente.
También, se ha ampliado la zona de mesas de madera que son muy frecuentadas en los meses primaverales y se ha instalado un parque canino y aparatos de calistenia. En la parte más alta, se ha habilitado una zona vallada para que los vecinos interesados puedan tener un huerto y un circuito de pump track. La última intervención ha consistido en la instalación de una pasarela peatonal que conecta las dos márgenes del río Ucero en la parte alta de los paseos.