La causa se debe al asfaltado de uno de los carriles de la redonda. Hay retenciones de más de 30 minutos.
A causa del asfaltado que se está realizando en la vía interior de la rotonda del Caballo Blanco se ha montado el caos en las entradas y salidas a la capital soriana. Esto, sumado a la mala o pésima señalización en las vías, que apenas avisaban de que uno de los carriles de la redonda iba a ser cortada, ha provocado que el tráfico haya quedado paralizado con retenciones de 30 minutos, sino más en algunos puntos. En el caso de la entrada desde Burgos, los coches no solo han pasado la rotonda hacia Camaretas, sino que los vehículos han llegado hasta casi la gasolinera del centro comercial. En cuanto a la entrada por el avenida Valladolid, el tráfico se ha extendido por la misma, e incluso hacia las vías que dan acceso al polígono. En lo que respecta a las entradas desde Golmayo y Madrid, más de lo mismo.
La situación, aunque parece que estaba siendo dirigida por los trabajadores de las obras, todavía continúa con paralizaciones, provocando que algunos conductores salgan de sus vehículos para comprobar cuál era la causa de las mismas.