Los adnamantinos ya se sitúan ocho puntos por encima de la zona de descenso tras sus últimas dos victorias consecutivas.
La S.D. Almazán dio un golpe encima de la mesa ayer por la tarde al ganar en el campo del Palencia Cristo, uno de los terrenos de juego más complicados de la categoría. Tras vencer el pasado jueves al Bembibre en el encuentro que tenían aplazado, los de Santiago García Sedano salieron ayer con la moral por las nubes de cara a lograr una victoria de mérito ante un equipo que pugna por el play off.
Después de una primera parte muy igualada, en la que escasearon las ocasiones para ambos bandos, los dos contendientes salieron con una marcha más a los segundos 45 minutos. A pesar de ello, el gol se hizo esperar. Este no llegaría hasta el último minuto de un encuentro que se decidió gracias a una acción a la contra que finalizó a la perfección Adrián Martínez.
Entrando en éxtasis toda la plantilla y el cuerpo técnico de la S.D. Almazán, estos celebraron un triunfo que bien puede valer una permanencia en Tercera RFEF. Con este resultado, los de Sedano se mantienen en la duodécima posición de la clasificación con 31 unidades, distanciándose a ocho puntos del filial Mirandés, conjunto que marca la zona de descenso con 23.
Con todo ello, los blanquiazules cierran una Semana Santa de matrícula de honor en la que han ganado a domicilio al Bembibre y al Palencia Crista, acercándose al objetivo por el que llevan luchando toda la temporada.