Representantes de estos negocios elaboran una serie de propuestas para el mantenimiento de este tipo de negocios en dos regiones donde la despoblación lleva al cierre de una gran parte de establecimientos.
Representantes de la Confederación de Comercio de Castilla y León (CONFERCO) se han reunido con sus homólogos de la Confederación de Empresarios de Comercio de Aragón (CEMCA) para plantear unas líneas comunes de defensa del pequeño comercio.
La situación de este tipo de negocios en ambas comunidades es similar, ambas sujetas a una gran competencia de las grandes superficies, la venta online y venta directa de fabricantes, la grave despoblación y el envejecimiento que afecta a ambos territorios, así como la falta de apoyos institucionales.
Las partes han abordado la necesidad de digitalizar y modernizar sus negocios de cara a adecuarse a las necesidades de la sociedad.
El presidente de CONFERCO, el soriano Adolfo Sainz, ha recordado a los aragoneses que en “los diez últimos años, el 25% del pequeño comercio en Castilla y León ha cerrado y son datos muy duros”. Consciente de que la problemática se extiende a Aragón, Sainz ha manifestado su negativa “a que cierre ningún pequeño comercio” y ha asegurado que la entidad que encabeza “trabaja para intentar parar esta sangría”.
Por su parte, el presidente de CEMCA, Rodolfo Bernad, ha explicado que “este encuentro es el lugar idóneo para hablar de temas que nos afectan en común como la despoblación y el comercio de proximidad, que se encuentra muy desprotegido en estas regiones, para llegar a posibles acuerdos y tomar soluciones”.
Con esta sinergia entre comunidades autónomas que suponen el 40% de los municipios de toda España con más de 3.000, Bernad considera que es posible “dotar de medios en las zonas rurales envejecidas y afectadas por la despoblación, procurar facilitarles la digitalización y conseguir una serie de objetivos que permitan que estos comercios se puedan ir defendiendo y mejorando su capacidad de oferta”.
En el transcurso de la reunión se han adoptado acuerdos como la elaboración de un manifiesto en defensa del modelo comercial español - mediterráneo cuyo elemento fundamental es la tienda; elaborar una serie de propuestas para trasladarlas a los partidos políticos que concurran a las próximas elecciones europeas para que trasladen la problemática del comercio español; y por último apoyar la propuesta de la Confederación Española de Comercio trasladada al ministro de Economía para que mantenga la estructura de Comercio Interior en su departamento.