Unai Sordo, secretario confederal de CCOO y Vicente Andrés, secretario general de CCOO Castilla y León, han aclarado que el acto vandálico que tuvo como objeto La Casilla de La Rasa “tiene que ver con el proceso de demonización y radicalización que una buena parte de la derecha y la extrema derecha han emprendido tanto en España como en el mundo”. Piden a Mañueco que no siga adelante con la Ley de la Concordia, ya que solo generará “enfrentamiento entre los ciudadanos”.
Marcelino Camacho ha sido homenajeado este sábado, 25 de mayo, en El Burgo de Osma, municipio al que pertenece su localidad natal, La Rasa. En el acto, que ha contado con la participación de representantes de CCOO, el PCE y familiares del propio Camacho, ha generado una gran expectación en la céntrica plaza de Santo Domingo. Sin embargo, según Unai Sordo, secretario confederal de CCOO, no se trataba de una simple celebración y es por elllo que no ha coincidido con ninguna efeméride: “Responde a un desagravio a la figura de Camacho, cuya casa natal sufrió un ataque vandálico en octubre de 2023”.
Destaca Sordo que aunque en otro momento de la historia de nuestro país podría achacarse a un simple acto de “gamberrismo”, está en realidad relacionado “con el proceso de demonización y radicalización que una buena parte de la derecha y la extrema derecha han emprendido tanto en España como en el mundo”. Lamenta la “demonización” a aquellos que lucharon por el socialismo, la Democracia y las libertades y buscando “reivindicar su figura como uno de los grandes padres de la Democracia española”, denuncia “la involución ultraderechista” que está teniendo lugar en España y a nivel mundial. “Supuso mucho en la historia de nuestro país en su lucha por las libertades, contra la dictadura y por la Constitución, de la que algunos ahora se quieren apropiar, pero que fue producto de miles y miles de trabajadores en las calles, huelgas, mucha cárcel, represión e incluso algunos muertos”, subraya el líder de CCOO.
Vicente Andrés, secretario general de CCOO Castilla y León ha secundado estas ideas, afirmando que “por cada acto vandálico que se oponga a nuestra historia, habrá una respuesta sindical”. Considera que la región se ha convertido “en un santuario de la extrema derecha en el que actúa de forma impune”. Es por ello que pide a Mañueco que “de marcha atrás en su idea de aprobar la Ley de Concordia, que es más bien una ley de discordia, de enfrentamiento entre ciudadanos y debe reflexionar sobre ese paso que pretende dar, una vez que la ONU ha dicho que está fuera del marco legal”.