Con un plazo de ejecución de 18 meses, las obras en la Edar de ambos municipios se plantean con la idea de "arreglar definitivamente los problemas de vertidos que ha tenido la zona".
La depuradora de Ágreda y Ólvega afronta, durante los próximos 18 meses, una inversión de unos 3,3 millones de euros para el "acondicionamiento y ampliación" de sus sistemas. Las instalaciones han recibido esta mañana la visita del director general de Infraestructuras y Sostenibidad Ambiental, José Manuel Jiménez, quien ha destacado que la idea de la intervención es "adaptarla a las nuevas necesidades de los municipios y arreglar definitivamente los problemas de vertidos que ha tenido la zona".
De estos fondos, 1 millón de euros servirá para "mejorar y eliminar las aguas de infiltración que e entran en los colectores del municipio de Ágreda" y 300.000 euros se dedicarán a "actuaciones urgentes para mejorar de forma inmediata las características del agua de vertido", ha referido el director general.
La Junta de Castilla y León aportará el 80% de la inversión y el 20% restante se dividirá entre los Ayuntamientos de Ágreda y Ólvega. El objetivo es "contar con una Edar de tamaño y calidad para mantener la industria y la actividad económica" en una zona que ha experimentado un importante crecimiento, ha señalado Jiménez.
El director general ha puntualizado que "la carga de aguas industriales exige mejorar algunos sistemas y ampliar la capacidad, en concreto, de los decantadores". Una adaptación que debe ser "rápida" y cuenta con la declaración de urgencia. Además, la gestión de las instalaciones correrá por parte de Somacyl, lo que asegura una "garantía de control de su funcionamiento", ha concluido Jiménez.