La ciudad se convertirá en ciclable gracias a una inversión de 1,7 millones de euros, el 70% financiados por fondos europeos y el 30% municipales. Casi 2.300 metros nuevos de carril bici y 18 aparcamientos. Se aprovechará para poner un elevador en la calle Diego Acebes y remodelar las plazoletas anexas a la plaza de toros.
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Soria saca a licitación la ejecución de su proyecto de ampliación del carril bici en la ciudad. El objetivo de esta actuación, que tiene un presupuesto de 1,7 millones de euros (financiados 70-30 entre la UE y el consistorio) es unir los actuales tramos de carril bici que tiene la ciudad y convertirla en una ciudad donde la bicicleta sea una alternativa como medio de transporte.
Así lo explicaba esta mañana en rueda de prensa Carlos Martínez Mínguez, alcalde de la capital quien se mostraba conocedor de las dificultades que presenta la orografía de la ciudad para este tipo de movilidad. La actuación se centra fundamentalmente en la zona de las travesías que se están recuperando gracias a la inversión del Gobierno y en unir estas con los carriles bici ya existentes.
La pavimentación, arbolado e iluminación será la misma que la de las nuevas travesías y también se actuará en el mobiliario urbano, la señalización y la accesibilidad. En este sentido destaca la actuación en las escaleras que unen Diego Acebes con la rotonda del alto del Espolón con un elevador que permitirá salvar las escaleras y en la reforma de las dos plazas colindantes a la plaza de toros, la plaza de las balsas y la plazoleta que queda frente a las taquillas.
En total, 2.277 metros nuevos de carril bici que se completarán con 16 aparcamientos en forma de U y otros 2 que permitirán usarse para bicicletas eléctricas. En este sentido, el alcalde ha indicado que es intención de la ciudad volver a apostar por un sistema de bicicletas eléctricas de alquiler.
Sin duda, uno de los puntos más conflictivos del proyecto será la eliminación de un centenar de plazas de aparcamiento en el centro de la ciudad. Este recorte se producirá principalmente en calles como Santo Tomé o la calle Hospicio. Mínguez reconoce el problema en una zona ya de por si tensionada para el tráfico y el aparcamiento de vehículos.
“La falta de aparcamientos es un problema que tendremos que resolver con el Plan General de Ordenación Urbana”, dejaba entrever Carlos Martínez. Un PGOU que requiere de una actualización pues va camino de cumplir los 20 años en vigor. El edil socialista ha indicado que cuando se construya el parking en el solar del circo, junto a la estación de autobuses, se crearán más de las 100 plazas de aparcamiento que se van a destruir ahora, aunque las zonas de ambas actuaciones no son las mismas.
Preguntado sobre si esta eliminación de 100 plazas de aparcamiento en el centro supondrá también el traslado de plazas de zona azul hacia el extrarradio del centro, ampliando así las zonas de pago por estacionar de la capital, el alcalde ha señalado que el pliego de la zona azul finaliza este año y que “habrá que ver dónde desplazamos esas plazas” en función de cómo quede definitivamente el entramado de la ciudad.
Esta previsto que todas las obras, divididas en 5 actuaciones, comiencen en septiembre de manera simultánea y con un plazo de ejecución de unos 8 meses. Los nuevos carriles bici tendrán una anchura de 2,5 metros, por los 3,2 de los carriles de coches, salvo aquellas zonas en las que es imposible mantener esas distancias. También se ha intentado ampliar el tamaño de las aceras.