El Ayuntamiento de la capital logra 1,5 millones de euros de fondos europeos vinculados al PERTE del agua. La renovación de los contadores (finalizada esta actuación todavía quedarán más de 10.000 ‘caducados’) permitirá eliminar el polémico gasto mínimo. La inversión en la nueva depuradora también se verá repercutido en la tarifa.
El Ayuntamiento de Soria ha logrado una nueva de ayuda con fondos europeos, en este caso vinculada al PERTE del Agua. Son un total de 1,5M€ que subvencionan una actuación que asciende hasta los 2.411.785 euros y que se centra en la mejora del ciclo del agua de la ciudad. Se espera que la actuación reduzca un 14% las pérdidas y el consumo de agua en Soria y tendrá que estar terminada en junio de 2026.
En montante mayor de la inversión será en la línea de distribución (los contadores) aunque también se actuará en captación y potabilización del agua y en el sistema de alcantarillado y saneamiento mediante la digitalización de los mismos. El proyecto incluye nuevos planes de emergencias por sequias e inundaciones y un plan de control de la calidad del agua de grifo.
La ciudad cuenta actualmente con unos 24.300 contadores de agua, de ellos se estima que unos 18.700 están obsoletos pues tienen más de los 12 años que marca la legislación. De ellos se han renovado 1.482 dentro de las inversiones anuales que realiza la empresa mixta del agua con un valor anual cercano al millón de euro procedente de los beneficios de las mismas.
Gracias a esta actuación de 2,4M€ se dará algo de velocidad a este proceso de renovación progresivo, con el cambio de 4.060 contadores. Eso significa que, aun acabada la actuación, más de 13.000 contadores todavía estarán pendientes de ser actualizados.
El alcalde de Soria ha señalado que este plan servirá para la “modernización, digitalización y eficiencia del consumo de agua de la ciudad”. Señala Carlos Martínez que el objetivo es “tener un mejor y mayor control sobre el consumo de agua, dotarle de más trasparencia y detectar de manera inmediata anomalías y averías”.
Gracias a los nuevos contadores la ciudad y los vecinos tendrán “información sobre los consumos reales” lo que permitirá una modificación de la tarifa. Durante años, vecinos y colectivos se han quejado del gasto mínimo que se cobraba a cada hogar, muy superior en la mayoría de los casos al consumo real.
Mínguez ha señalado que este consumo mínimo hace las veces de cuota de mantenimiento tarifario pero que cuando la mayoría de contadores de la ciudad permitan conocer el consumo real se cambiará el sistema.
En cualquier caso, esto no pasará hasta la puesta en marcha de la nueva depuradora. Para ello quedan cerca de dos años, entre la terminación de las obras y la puesta en marcha de la nueva EDAR. Serán unos 15 o 18 millones de euros (el tercio correspondiente al ayuntamiento, siendo los otros dos financiados por el Estado y la Junta) que, según lo acordado, se tiene que repercutir obligatoriamente en la tarifa municipal. Esta cifra se amortizará pues en los recibos del agua durante un especio de 25 o 30 años.
Mínguez ha querido destacar las importantes inversiones que se han realizado durante la última década para mejorar el ciclo del agua en la ciudad. Destaca además el primer edil que la ciudad tiene una de las 5 aguas más baratas de las capitales de España y una de las 10 mejores en cuanto a calidad. “Es el resultado de una gestión eficaz”, presume.
Carlos Martínez señala los nuevos retos de la red del agua de la ciudad que pasan por mejorar la captación de agua. El plan pasa por explorar una nueva línea de potabilización que permita ampliar la capacidad de abastecimiento de la red y permitir crecer a la ciudad. Un plan a medio plazo para el que también “habrá que empezar a buscar financiación”.