La oposición habla de Soria como una ciudad “improvisada, que se ejecuta a golpe de subvención y con un PGOU de hace 20 años”. Piden semáforos inteligentes, la reducción de las plazas de zona azul en el nuevo convenio y parkings gratuitos en los barrios.
Trayectos más largos, carriles bici con adoquines y obras que se solapan. Una Zona de Bajas Emisiones donde “no sabemos quién va a estar detrás de las cámaras o si se van a aprovechar fondos europeos que son para una cosa para otra”, unos semáforos que “deberían ser inteligentes” y obras con retrasos y sobrecostes importantes como el parking de Doctrina.
Todo ello junto a la eliminación de 390 plazas de aparcamiento en el centro de la ciudad y las travesías. Estos son algunos de los argumentos que pone el Partido Popular encima de la mesa para criticar la gestión del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Soria en materia de movilidad y ordenación urbana.
Así lo han señalado en una contundente rueda de prensa de los concejales populares María Madurga y Muñoz Remacha quienes hablan de un “caos circulatorio es total y absoluto” en la ciudad. Aclarando que su partido está a favor de las obras y las mejoras, los populares acusan a los socialistas de falta de planificación.
Acusan a los socialistas de crear nuevos problemas en lugar de “solucionar los problemas reales de los sorianos”. Considera que falta “sentido común” y “responsabilidad” a la hora de plantear los proyectos y piden más modestia al equipo de gobierno para tener en cuenta las opiniones de oposición y vecinos.
“Las obras mal gestionadas no solo son incomodas, sino que generan riesgos innecesarios”, explica Madurga quien señala “zonas mal señalizadas, pasos estrechos, aceras peligrosas, protecciones peatonales no ancladas al suelo que en días como hoy se las lleva el agua…”. Además, la edil popular advierte que la próxima semana empieza el colegio.
El Partido Popular ha lamentado que la nueva Soria tiene “un aumento significativo del tiempo de desplazamientos”, con el coste medioambiental y en calidad de vida que eso supone, “atascos” y “hace imposible los traslados de personas con movilidad reducida”.
En los casos concretos, los concejales han denunciado los perjuicios a vecinos y comerciantes por “los sobrecostes y los retrasos del parking de Doctrina”. También los problemas que generan los adoquines, “levantados a las 2 semanas en la calle Alfonso VIII” o el incumplimiento en el tipo de pavimiento de las obras de las travesías.
El PP ha querido sacar a la palestra que las obras que se están llevando a cabo en la ciudad, y algunas de las programadas, supondrán la eliminación de 390 plazas de apocamiento. De ellas, la carretera de Logroño y la entrada a Soria desde Zaragoza serán las más afectadas con hasta 170 sitios menos.
Una problemática que afecta prácticamente a todos los barrios de la ciudad. En el centro se eliminarán 80 plazas por la instalación del Carril Bici, en Los Royales se ha suprimido 40 por la nueva Comisaría de la Policía y en Los Pajaritos una docena por la subdelegación de defensa. La zona del Fuente del Rey y la de Los Pajaritos también se verán afectadas por la eliminación de 100 plazas dentro del proyecto BRERA.
“Los sorianos quieren soluciones y el equipo de gobierno socialista lo que hace es generar problemas”, lamenta Muñoz Remacha. El popular recuerda que su partido llevaba en su programa parkings gratuitos en La Barriada, Santa Clara, el Mirón, el solar de la antigua cárcel y las traseras de la Concatedral. Considera que esta sería una forma de poner coto al problema.
Otra sería controlando la zona azul. “Al final vamos a llegar con la zona azul al polígono”, ironiza Remacha al recalcar que algunas de las plazas eliminadas son de pago y que al tener el contrato con la adjudicataria 630 fijadas estas se tienen que dar en otro terreno. Como el contrato finaliza este año, el PP pide aprovechar para reducir en unas 200 las plazas de zona azul de Soria, “aunque se ingrese algo menos de dinero”.
Considera Remacha que, ahora mismo, la Zona Azul se extiende a zonas que no son comerciales. Espera el concejal popular que el consistorio sea consciente de los problemas al hacer el próximo pliego, aunque tema que “seguramente caducará y estaremos en precario como con casi todo en este Ayuntamiento”.
Sobre la Zona de Bajas Emisiones han informado que pedirán más detalles para “saber qué va a gestionar” y “quién va a estar detrás de las cámaras”. Algo que “interesa e inquieta” a un PP que se pregunta si se han logrado fondos europeos “para un fin y se van a utilizar para otro”. También se quejan de la ausencia de un sistema de regulación de semáforos inteligente. Algo que, aseguran, sucede en muchas ciudades de nuestro entorno. “No hace falta inventar la rueda, solo querer dar soluciones”.
“Donde no hay talento, pegote de cemento”, lamenta el PP que también critica la falta de planificación y comunicación con otras administraciones para no simultanear todas las obras. Se quejan los populares que las obras en la variante están metiendo el tráfico en la ciudad justo cuando más se está modificando el tráfico por las travesías. También consideran un error quitar un carril en Eduardo Saavedra sin haber concluido antes la Ronda del Duero, tal y como indica el plan de movilidad de la ciudad. En resumen, “una ciudad improvisada, que se ejecuta a golpe de subvención y de modificación del PGOU de 2006”.