El acto de homenaje se va a realizar en el cementerio nuevo de La Muedra que ha sido restaurado recientemente por el Ayuntamiento de Vinuesa.
Recordar a los últimos habitantes de La Muedra que tuvieron que abandonar sus casas y haciendas para dejar paso a la construcción de una gran presa reguladora del cauce del Duero es el objetivo del acto organizado por el Ayuntamiento de Vinuesa este domingo, 1 de septiembre.
El alcalde de Vinuesa, Juan Ramón Soria, ha sido el principal impulsor de este sencillo acto que pretende evitar que caigan en el olvido los habitantes de este pueblo que se tuvieron que enfrentar al trágico destino de una expropiación que les arrancaba de sus hogares.
Vinuesa, Salduero, Molinos de Duero y El Royo fueron alguno de los pueblos donde acudieron a asentarse los últimos vecinos de La Muedra cuando ya nos les quedó más remedio que aceptar las indemnizaciones del Estado y recoger sus cosas para abandonar su tierra y hacienda.
El acto de homenaje se va a realizar en el cementerio nuevo de La Muedra que ha sido restaurado recientemente por el ayuntamiento de Vinuesa y donde se va a descubrir un memorial en recuerdo de este pueblo y de sus últimos moradores. También se han colocado otros elementos decorativos, como poemas y versos.
Una exigencia de los vecinos de La Muedra, antes de abandonar sus hogares, fue que se trasladasen sus muertos del cementerio para evitar que fuera anegado, por lo que se construyó un nuevo camposanto a donde se trasladaron los restos mortales de todos los vecinos de Las Muedra que descansaban en el viejo cementerio, junto a la Iglesia, y este es el lugar elegido para hacer el homenaje.
El acto inaugural del memorial de La Muedra tendrá lugar este domingo 1 de septiembre a las 11 horas en el nuevo cementerio de La Muedra, que se situó en un lugar alto para no ser inundado, pero lo más cercano posible al que había sido su pueblo, que todavía puede verse cuando está baja el agua embalsada.
Los interesados en acudir a rendir homenaje a los vecinos de La Muedra deben acudir a Vinuesa, pasando el puente que hay junto al campo de fútbol, avanzando unos 5 kilómetros por la pista forestal, quedando el embalse en el lado izquierdo.