Por todos los presuntos delitos cometidos, el conductor podría sufrir penas que superan los 9 años de prisión, privación del permiso de conducción de 6 a 10 años, multa de 12 a 24 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.
A las 07:45 horas del día 27 de agosto de 2024, efectivos del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Soria, procedían a la detención de un varón de 40 años de edad, vecino de Villamediana de Iregua (La Rioja); como presunto autor de un concurso de delitos consistentes en la conducción de vehículo a motor con temeridad manifiesta, conducción de vehículo a motor teniendo suspendido judicialmente el permiso de conducción, atentado a Agentes de la Autoridad, resistencia y desobediencia grave a los mismos y daños a vehículos y material de dotación oficial. Por otro lado, tenía pendientes dos órdenes de detención y personación por los Juzgados nº 2 y 3 de Logroño y otra de la Audiencia Provincial de Álava, arrojando resultado positivo en cocaína y THC, enviándose las muestras para contraste y análisis a laboratorio oficial.
La actuación se iniciaba a la altura del km. 15,000 de la carretera SO20 (Circunvalación de Soria), cuando una patrulla observaba cómo una furgoneta circulaba realizando varios adelantamientos rebasando la “línea continua”, poniendo en concreto peligro a los vehículos que circulaban en sentido contrario.
Ante la temeridad, imprudencia y agresividad mostrada en la conducción por el conductor hacia el resto de los usuarios de la vía durante más de 10 km, en su afán de fuga (incluido un intento de atropello a uno de los Guardias Civiles y daños por embestida en dos de los vehículos oficiales, al tratar de echarlos de la vía), fue preciso realizar un dispositivo especial con varias patrullas, con el firme objetivo de evitar daños personales y materiales, garantizando en todo momento la seguridad vial.
Tras lograr finalmente detener el vehículo, se realizó prueba de drogas al conductor, arrojando resultado positivo en cocaína y THC, estando pendiente de recibirse resultados del laboratorio oficial al que se remitieron las muestras para su análisis; pudiendo comprobar, además, que carecía de permiso de conducción por habérsele suspendido judicialmente, y existía sobre él una orden de detención por dos Juzgados de Logroño y la Audiencia provincial de Álava.
El detenido fue entregado junto con las diligencias en el Juzgado de Instrucción nº 2 de los de Soria, ingresando esa misma tarde en el centro penitenciario de Soria.
Por todos los presuntos delitos cometidos, el conductor podría sufrir penas que superan los 9 años de prisión, privación del permiso de conducción de 6 a 10 años, multa de 12 a 24 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.