Los hechos, acaecidos a comienzos de agosto, llevaron a la agrupación Abogados Cristianos a elevar una denuncia, la cual, indican en el Ayuntamiento "está repleta de errores y confusiones".
Toda vez que la agrupación Abogados Cristianos interpusiera una denuncia contra el alcalde de Soria por el gesto de realizar bendiciones con una escobilla de inodoro, subido en el techo de un automóvil a modo de 'papamóvil', durante las fiestas de Tardelcuende a comienzos de agosto, ahora la justicia ha abierto diligencias por aquel gesto. El trámite está siendo llevado por el Juzgado número 3 de Soria.
En la agrupación consideraron que aquella acción supuso un delito contra los sentimientos religiosos por lo que ahora interpondrán una querella a petición del juez, para que la parte denunciante pueda personarse en el procedimiento penal. Al efecto, queda establecido un plazo de diez días.
Tras haber sido conocidos los hechos, Carlos Martínez Mínguez reconoció posteriormente su conducta y pidió ser disculpado por ello.
Hoy, en el Ayuntamiento de Soria han indicado que el proceso actual no es el adecuado y que el texto de la denuncia "está repleto de errores y confusiones como se puede comprobar con su lectura tanto en la fecha, como en las personas y participantes".
Por su parte, el regidor, reafirmándose en la disculpa, ha manifestado que no obró con intencionalidad y que no supo "calibrar la reperercusión" por aquellos hechos.
Por otro lado, ha lamentado de la “la manipulación que hoy se ve encima de la mesa con el fondo de la denuncia, que es absolutamente falsa y también sobre la confusión que se trata de generar con la información de hoy. Lo que hoy dice el Juzgado es que el camino que había tomado Abogados Cristianos de la denuncia no era el camino adecuado, sino que tiene que ser mediante la presentación de una querella que en su caso será admitida o no a trámite. La nota que remiten a los medios de comunicación trata de generar una atribución de responsabilidades ya sobre mi persona que no existen".