En 2023 aumentó un 10% los extranjeros detenidos en un año. La franja de edad donde se cometen más delitos es de los 40 a los 60 años. El año pasado hubo en Castilla y León 820 detenidos menores de edad, de los que 595 fueron varones.
El número de delitos en Castilla y León durante el pasado año se situó en 89.824, un 3,4% más que durante 2022. Un dato que no se distribuye de manera pareja pues mientras en algunas provincias como Valladolid y Zamora los hechos conocidos (delitos denunciados) llegaron a bajar algo más del 1% en otras provincias el aumento rondó el 10% e incluso el 20%.
Es el caso de las provincias de Ávila, Segovia y Soria que son, casualmente, tres de las provincias más despobladas de Castilla y León. En la primera los delitos conocidos aumentaron un 18,2, mientras que en Segovia lo hicieron un 10,7% y en la provincia cabecera del Duero lo hicieron un 9,2%. Son datos que se desprenden del Anuario Estadístico del Ministerio del Interior para el año 2023 recientemente presentado.
No solo crecieron los delitos denunciados, sino que también lo hizo, y en mayor número, el número de hechos esclarecidos y el de casos con detenciones e investigaciones. Los primeros subieron un 7,4% hasta los 36.361 y los segundos un 6,7% hasta los 19.621.
Hubo 820 detenidos menores de edad de los que 595 fueron varones. En el caso de los extranjeros fueron 4.161 (un 10,5% más) los detenidos de los que 3.517 fueron extranjeros. La franja de edad con más detenidos es la de los 40 a los 60 años con 7.726 personas, seguida por los de 18 a 30 (5.590) y los de 31 a 40 años (4.525).
Si nos centramos en las infracciones graves relacionados con la violencia de género estos han aumentado en casi dos por día en el último año, hasta llegar a los 4.618. El año pasado fallecieron 3 mujeres por violencia de género, fueron asesinadas, según el informe, una en Ávila, otra en Salamanca y una más en Valladolid.
Castilla y León contaban a finales de 2023 con 4.099 casos activos por violencia de género. Casi un cuarto de ellos se situaba en Brugos, siendo la provincia que tenía la mayor cantidad de casos, pese a no ser la más poblada de la comunidad (Valladolid y León la superan y Salamanca le sigue de cerca en el cuarto lugar).
Un último dato, en 2023 en Castilla y León se produjeron 11 actuaciones de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado por trabajo forzado o esclavitud y 25 por delito de explotación sexual.