El entrador ha reconocido que les pasó factura “la ansiedad” ante el San Roque. No obstante, los celestes ya piensan en resarcirse este jueves en la pista del Cisneros en competición europea.
El Grupo Herce empezó la temporada en Superliga con el pie torcido. Los celestes cayeron por 3-1 en la pista del San Roque en una tarde aciaga en la que las cosas se empezaron a complicar en el tercer set. Después de un buen inicio de partido, en el que los sorianos dispusieron de varios puntos de ventaja, la situación cambió en el momento en el que su juego se empezó a desordenar.
En ese sentido, el entrenador, Alberto Toribio, ha puesto encima de la mesa los aspectos en los que fallaron: “No tuvimos las cosas claras en el contrataque. Además, el perder ese set cuando parecía que lo íbamos a ganar nos afectó en el rendimiento del segundo y en la gestión de las emociones. En ese momento, ellos estuvieron por encima y nosotros nos metimos en su juego con ansiedad”.
Posteriormente, los sorianos se recompusieron en el tercero para volverse a meter en la lucha por los puntos. Sin embargo, el cuarto set volvió a caer del lado de los locales: “No tenemos que olvidar en ningún momento lo que somos: un equipo y un club de límites. Si bajamos del rendimiento límite podemos perder en cualquier pista y en esta ocasión no tuvimos ni el oficio ni el nivel para ganar”.
Sin tiempo para lamentaciones, el Grupo Herce ya tiene la mira puesta en su debut en la Challange Cup frente al Cisneros el próximo jueves a las 20:00h. Los de Alberto Toribio, que emprenderán su viaje hasta Tenerife el próximo miércoles por la mañana, tratarán de mostrar una versión diferente a la del sábado. “Nos viene bien, aunque por otro lado supone una carga dos viajes tan seguidos a Canarias. Sin embargo, nosotros somos los que nos hemos metido en esto porque nos lo hemos ganado”, ha manifestado el preparador vallisoletano.
De cara a ese encuentro, el entrenador del Grupo Herce espera un rival muy parecido al de este fin de semana. Ahora, pase lo que pase, ha hecho hincapié en que no hay puntos en juego y en que todavía queda un partido de vuelta el próximo miércoles en Los Pajaritos: “Queremos ganar allí como en todas las pistas a las que vamos, pero es un choque diferente”.
El combinado celeste regresa a Europa un año más tarde con el mismo reto que la temporada pasada. La escuadra soriana quiere seguir dando pasos en su proyecto, enfrentándose a equipos de ligas superiores para continuar mejorando. En esa dirección, pretenden llegar lo más lejos posible, aunque su técnico ha reconocido que es irreal “pensar que cualquier equipo esta preparado para luchar por el título porque la liga todavía está muy lejos”.
Al mismo tiempo, ha lamentado que el sorteo les haya emparejado con un conjunto español, “situación que en otros deportes no pasa”. A tal efecto, ha incidido en que les hubiera venido mejor a los dos enfrentarse a combinados de otros países para conocer otras realidades. Con todo ello, el Grupo Herce afronta una nueva aventura europea en la que intentará volver a ilusionar a toda la provincia.