Vichy Catalán ha celebrado hoy en Almazán los 50 años de una de las marcas más populares de agua mineral natural de toda España; Monte Pinos. En un emotivo acto en el que han participado más de 200 personas se ha destacado a la botella azul como “el mejor embajador que tiene Almazán”. Una marca que, pese a ser comprada hace 20 años por la multinacional catalana, continúa generando cerca de 50 empleos en la villa y distribuyendo agua soriana en más de 67 millones de botellas.
“Un día especial para Almazán y para la provincia”, señalaba el alcalde Jesús Cedazo en la apertura de una cita que ha servido para homenajear a Pedro Navalpotro. Amigos y compañeros han recordado como la familia se desplazó de Medinaceli a Almazán en 1939, comenzaron su negocio de gaseosas y como, en 1974, compraron los terrenos donde apareció el manantial de Montepinos. “La gente desconfiaba entonces de que vender agua pudiera ser un negocio”, afirman para definirlo como “un visionario”, un hombre “emprendedor y amante de su pueblo”.
También se ha destacado su compromiso social y su carácter “extraordinariamente generoso” materializado finalmente en la Fundación Pedro Navalpotro que ayuda a llevar agua potable a todos los rincones del mundo. Como un agua de extraordinaria calidad y muy baja en sodio, Monte Pinos se posiciona en el mercado como el agua ideal para pacientes hipertensos, deportistas y para la elaboración de alimentos infantiles. Por esas cualidades, Vichy Catalán celebra el 50 aniversario lanzando la campaña ‘Corazones Fuertes’. Puedes leer más sobre Monte Pinos en este reportaje.
Pedro Navalpotro ha agradecido el cariño mostrado y se ha felicitado de reencontrarse con numerosos clientes, proveedores y distribuidores. “Vender la empresas que has creado es como perder a un ser querido”, reconocía, para señala que “a mi me tranquilizó mucho a quién se la vendí”. Señala que si la empresa funciona y está preparada para el futuro salen buenos compradores. “La operación se cerró en tan solo 5 días y con la sensación de que nos conocíamos de toda la vida”, recuerda definiendo a los dueños de la multinacional catalana como “gente sana, amable, entendida y fiable”.
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