Aunque la nieve, esquiva, no ha querido dejarse ver hasta ahora de manera apreciable en la provincia, el puerto de Santa Inés y su punto de nieve, en la Ibérica compartida con La Rioja, regala estos días imágenes como las que acompañan a estas líneas. Las bajas temperaturas llevan a mantener un paisaje envidable para los ojos y también para quien echa de menos un halo blanco en el horizonte, con ondulaciones a su antojo, cielos azules amalgamados con nubes limpias y pinos, centenarios muchos, que soportan estoicamente este manto que, de algún modo, también abriga y acoge los sentidos.