El consejero alaba el comportamiento de la ciudadanía durante el tiempo en el que se ha extendido la falta de suministro eléctrico.
Castilla y León respira aliviada y recupera la "práctica normalidad" tras el extenso corte de suministro eléctrico que afectó a la región este lunes, 28 de abril. Así lo ha señalado el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones a primeras horas de la tarde de hoy martes.
Salvo incidencias puntuales de inestabilidad en las comunicaciones telefónicas en algunas zonas, el fluido eléctrico ha sido restablecido en la práctica totalidad del territorio, según ha confirmado el consejero. Las compañías eléctricas y los equipos de emergencia continúan trabajando para garantizar la estabilidad completa del servicio.
La gestión de esta crisis ha estado liderada por la Junta de Castilla y León, coordinando la respuesta desde la sala del servicio de Emergencias 112 y el Centro de Coordinación de Emergencias (CECOE), bajo la dirección de la Agencia de Protección Civil. La magnitud del incidente se refleja en las "más de 3.500 llamadas" recibidas y gestionadas, un volumen que puso a prueba la capacidad de respuesta regional. "Se han recibido en este ámbito más de 3.500 llamadas que han sido atendidas, gestionados todos los incidentes", ha detallado el consejero, subrayando la eficacia del sistema.
Según el responsable regional, ya en el primer momento, la prioridad fue garantizar el funcionamiento de los servicios esenciales. Los hospitales públicos mantuvieron su operatividad gracias a sus sistemas autónomos de generación eléctrica. En los centros de salud donde fue necesario, se desplegaron equipos electrógenos propios para asegurar la atención. Asimismo, se trabajó intensamente para mantener activos los servicios sociales, las residencias de mayores, los centros educativos y la movilidad dentro de las limitaciones impuestas por la falta de suministro.
La respuesta institucional se articuló mediante la activación, a primera hora del lunes, del Plan de Protección Civil ante Emergencias de Castilla y León (PLANCAL) en su nivel 2. Esta activación supuso la asunción de la gestión de la incidencia a nivel autonómico, constituyéndose un Centro de Coordinación Operativo Integrado (CECOPI) regional, presidido por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. Este órgano central coordinó a su vez a otros nueve CECOPI provinciales, asegurando una gestión capilar y adaptada a las necesidades de cada territorio.
Siguiendo la línea marcada por el presidente Mañueco, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, ha querido expresar un profundo agradecimiento a todos los profesionales que han trabajado y continúan haciéndolo para solventar esta emergencia. El reconocimiento se extiende, en primer lugar, al personal público de la Junta: "Me estoy refiriendo al personal público de sanidad, de servicios sociales, de movilidad, de educación, a todo el personal público medioambiental que han estado colaborando técnicos, agentes medioambientales, celadores de medio ambiente en toda esta estructura".
Un agradecimiento especial ha dirigido al personal directamente implicado en la gestión de la emergencia: "Por supuesto, al personal que está aquí, tanto el personal de la Sala 1 1 2 como el personal del Centro de Coordinación de Emergencias y de la Agencia de Protección Civil, a todos ellos mi agradecimiento y nuestro agradecimiento, y reitero, el mismo por ese compromiso". La labor coordinada desde el CECOE ha sido fundamental para el éxito de la operación.
La colaboración entre administraciones también fue clave. El consejero ha destacado la labor del personal de otras entidades: "Me estoy refiriendo a la Guardia Civil, al Cuerpo Nacional de Policía, a las policías locales, a la UME [Unidad Militar de Emergencias], que también ha estado a disposición y realizando aquellas tareas que les eran asignadas, y también a los bomberos de Castilla y León". Según el responsable autonómico, "han realizado todos una extraordinaria labor coordinada a través de este centro de coordinación de emergencias".
Finalmente, el consejero ha puesto en valor el comportamiento ejemplar de los castellanoleoneses. "Lo más importante es el comportamiento de la ciudadanía", ha afirmado. Ha resaltado también el uso responsable del teléfono de Emergencias 1 1 2 y la calma mantenida por la población ante una situación que generó "no solo incomodidad, sino a veces zozobra, sobre todo al principio". La respuesta cívica y la colaboración con las indicaciones de las autoridades han sido, en palabras del consejero, "nuevamente, una muestra de orgullo de las personas de Castilla y León".
Con la situación prácticamente resuelta, la vista está puesta en alcanzar la "normalidad total", solucionando las últimas incidencias de inestabilidad eléctrica o de comunicaciones telefónicas. Una vez se logre este objetivo, se procederá a desactivar el PLANCAL. "Esperemos que, a lo largo del día, las administraciones competentes cumplan con ese cometido y alcancemos la normalidad total, momento en el que dejaremos sin efecto el plan de protección civil que se ha activado y volveremos a esa normalidad plena", ha cocluido el consejero.