La portavoz popular en el Ayuntamiento pone el foco en la próxima desaparición de medio centenar de plazas en la avenida de Valladolid.
La avenida de Valladolid en Soria se encuentra en el epicentro de una nueva polémica urbanística que provocará a buen seguro el debate ciudadano. La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento, Belén Izquierdo, ha lanzado una seria advertencia sobre las consecuencias del proyecto de remodelación de esta céntrica vía, que contempla la eliminación de más de medio centenar de plazas de aparcamiento para la creación de un carril bici. Esta medida, según los populares, no es un hecho aislado, sino que se suma a una política municipal que ya habría supuesto la supresión de más de 600 estacionamientos en la ciudad, provocando problemas para los conductores sorianos y, según denuncian, sin ofrecer medidas para remediarlo.
La denuncia ha sido realizada hoy por Izquierdo directamente en la propia calzada donde está previsto intervenir, en el tramo de los números pares, el área que verá desaparecer sus actuales zonas de estacionamiento. "Nos encontramos en la Avenida Valladolid, en el lado derecho, números pares, y estamos aquí porque se va a producir la eliminación de todas las plazas de aparcamiento para hacer un carril bici", ha contextualizado, subrayando la inminencia de la actuación. Esta intervención forma parte de un proyecto de remodelación más amplio para la avenida, sobre el cual el PP ya había manifestado sus reservas.
Según las cifras aportadas por Izquierdo, la situación es alarmante para quienes dependen del vehículo privado. "Más de 50 plazas de aparcamiento que, junto con las de la calle San Benito y Santo Tomé, hará que vayamos por más de 600 plazas eliminadas", ha calculado. Esta considerable reducción del espacio disponible para aparcar, argumenta el PP, no viene acompañada de ninguna medida compensatoria. "No hay ninguna alternativa para los conductores sorianos, se incrementa la presión contra los vehículos", ha sentenciado la concejal, quien ha aventurado un panorama complicado para la movilidad en la ciudad.
En la oposición aseguran que esta problemática no es nueva y que llevan tiempo advirtiendo sobre sus consecuencias. "Y en este caso, íbamos denunciándolo desde el Grupo Municipal Popular dos años y tenemos cero alternativas, cero soluciones", ha lamentado.
Esta falta de previsión y de diálogo es uno de los principales reproches que el PP dirige al equipo de gobierno municipal. La sensación de abandono entre los afectados, según Izquierdo, es palpable, y la paciencia parece estar agotándose ante la falta de respuestas concretas a un problema que afecta directamente al día a día de muchos ciudadanos.
La crítica del Partido Popular se extiende también a la figura del máximo responsable municipal. Izquierdo no ha dudado en señalar directamente al regidor, Carlos Martínez, a quien ha acusado de desatender las necesidades de Soria por otras prioridades. "Es un alcalde a media jornada, que solo está preocupado por su cargo de secretario autonómico del Partido Socialista, y mientras tanto, cero soluciones", ha afirmado contundente. Estas declaraciones reflejan la profunda brecha política existente en el Consistorio capitalino respecto al modelo de ciudad y la gestión de los servicios públicos, con un PP que se erige como voz de los ciudadanos descontentos.
La eliminación de estas plazas en la avenida Valladolid se percibe por parte del PP no como una mejora aislada de la movilidad sostenible, sino como un eslabón más en lo que consideran una política de "presión contra los vehículos". Esta estrategia, advierten, podría tener consecuencias negativas no solo para los residentes que necesitan aparcar cerca de sus domicilios, sino también para el comercio local, que podría ver mermada la afluencia de clientes si se dificulta el acceso en vehículo. El debate sobre la peatonalización y la creación de carriles bici es común en muchas ciudades, pero el PP soriano insiste en que estas medidas deben implementarse con sensibilidad, planificación y, sobre todo, ofreciendo alternativas viables.
La formación popular argumenta que la falta de aparcamiento disuasorio o de nuevas bolsas de estacionamiento en zonas estratégicas agrava el problema. La pregunta que muchos sorianos se hacen, y que el PP canaliza, es dónde podrán aparcar sus vehículos si se continúa con esta tendencia.
El impacto de estas medidas, según el análisis del PP, trasciende la mera comodidad. Se trata, afirman, de una cuestión que afecta a la calidad de vida y a la dinámica económica de Soria. Pequeños negocios, servicios profesionales y familias con necesidades específicas de movilidad podrían verse particularmente perjudicados. Por ello, la demanda del Partido Popular es clara y urgente: "Los sorianos queremos alternativas ya", ha reclamado Izquierdo, resumiendo el sentir que, aseguran, es mayoritario entre los afectados.
En el Grupo Municipal Popular insisten en la necesidad de un plan de movilidad integral que contemple todas las sensibilidades y necesidades, no solo las de un sector de la población. Consideran que la promoción de la bicicleta o el transporte público no debe hacerse a costa de demonizar o arrinconar al vehículo privado sin ofrecer soluciones realistas. La planificación urbana, sostienen, debe ser fruto del consenso y del estudio pormenorizado de las consecuencias de cada actuación.
En este sentido, la remodelación de la avenida en cuestión y la supresión de sus aparcamientos se convierten en un símbolo de la confrontación entre dos visiones de ciudad. Por un lado, un equipo de gobierno que, según el PP, impone sus proyectos sin atender a las demandas ciudadanas; por otro, una oposición que reclama mayor atención a los problemas cotidianos y una gestión más dialogante y eficaz.
La portavoz popular ha concluido su intervención reiterando la firme postura de su grupo y su compromiso con los vecinos afectados. En la formación han anunciado que seguirán vigilantes y mantendrán su empeño de exigir al equipo de gobierno municipal que rectifique y ofrezca las alternativas de aparcamiento que, consideran, la ciudad necesita urgentemente.
La eliminación de estas más de 50 plazas en una arteria principal como la avenida Valladolid es, para ellos, la gota que colma el vaso en una gestión de la movilidad que califican de deficiente y perjudicial para los intereses de los sorianos.