Los visitantes pueden explorar los misterios de estos antiguos poblados fortificados y su invaluable herencia hasta finales de este mes.
La exposición ‘Cultura Castreña Soriana’ abre sus puertas en Almarza, ofreciendo una mirada profunda a uno de los principales referentes arqueológicos de la provincia. Esta muestra se enmarca en la conmemoración de los cien años desde que Blas Taracena iniciara el estudio de esta cultura milenaria en 1924, un legado cuya importancia trasciende las fronteras sorianas como ejemplo destacado del mundo céltico peninsular.
Fue precisamente Blas Taracena quien, hace un siglo, emprendió las primeras excavaciones en un castro de la serranía, logrando en 1929 clarificar las características de esta emblemática cultura arqueológica. Su trabajo ha sido fundamental para el conocimiento y divulgación de la vida de estas gentes, cuyos impresionantes poblados fortificados aún coronan los altos de dehesas y bosques dos mil quinientos años después.
Desde el verano pasado, diversas actividades científicas y divulgativas celebran este centenario. El objetivo es doble: por un lado, actualizar el conocimiento sobre estos antiguos habitantes y, por otro, potenciar entre la población actual el valor patrimonial de una cultura eminentemente ganadera, profundamente arraigada en las tradiciones serranas.
Organizada por la Diputación Provincial, la exposición en Almarza busca acercar al público, de forma amena y rigurosa, los múltiples valores de los castros. Los visitantes podrán descubrir sus imponentes murallas, las características piedras hincadas, los materiales utilizados y detalles de su economía. Además, la muestra resalta la riqueza natural y paisajística que envuelve estos enclaves, incluyendo bosques, acebales y dehesas, así como los bienes etnográficos como ermitas y recintos ganaderos que se han integrado en sus ruinas.
La exposición ‘Cultura Castreña Soriana’ puede visitarse en el salón Egido. Estará abierta al público de miércoles a domingo, en su horario habitual, hasta el 29 de junio de 2025, inclusive. Esta es una oportunidad única para sumergirse en el pasado celta de la provincia.
El término municipal almarceño no solo acoge esta importante muestra, sino que también es hogar de destacados yacimientos castreños como Los Castillejos de Gallinero y el Alto de la Cruz, este último compartido con Arévalo de la Sierra, junto a Garagüeta. Como parte de las celebraciones, está prevista para julio una ruta de senderismo guiada hasta Los Castillejos, ofreciendo una experiencia directa con este patrimonio.