José María Arnau y Xavi Riera son dos de los pilotos que participan en la Copa de España de Resistencia 1/5 TT Gas. Una carrera de coches teledirigidos de gran tamaño que pasará a la historia. Nocturna y de resistencia para enamorar a pilotos y espectadores.
Un pueblo con menos de 10 habitantes se convierte este fin de semana en el epicentro de una modalidad deportiva tan espectacular como exigente: las carreras de coches teledirigidos de gran escala. Villanueva de Zamajón (perteneciente al municipio de Tejado) y su circuito El Torreón, lo consiguen con una prueba más que especial: la primera competición nocturna de la historia de la Copa de España de Resistencia 1/5 TT Gas. Este hito ha atraído a entusiastas de toda España, como José María Arnau y Xavi Riera, ambos de 63 años, quienes han viajado expresamente desde Girona para poner a prueba su destreza y la resistencia de sus máquinas bajo las estrellas sorianas.
La Copa de España de Resistencia 1/5 TT Gas es una competición de alto nivel para vehículos de radiocontrol a escala 1/5, propulsados por motores de gasolina. Estos son modelos de "gran tamaño", capaces de alcanzar velocidades considerables y sortear los terrenos más complicados, de ahí la denominación TT (Todo Terreno).
Habitualmente, las pruebas de esta copa se desarrollan durante el día y tienen una duración estándar de unos 25 minutos, un formato de sprint donde la velocidad pura y la pericia en la conducción son claves. Sin embargo, la cita soriana rompe todos los moldes al proponer un formato de resistencia pura: una hora ininterrumpida de competición, lo que ha multiplicado por más del doble el desafío habitual para pilotos y máquinas.
La principal novedad y el mayor atractivo de esta prueba en el circuito El Torreón radica, sin duda, en su condición nocturna. Organizar y disputar una carrera de estas características bajo la luz artificial supone un reto logístico y deportivo. La visibilidad, tanto para los pilotos que dirigen sus máquinas desde un podio elevado como para los propios coches, se convierte en un factor crítico. La organización ha tenido que asegurar una iluminación adecuada y uniforme de todo el trazado para garantizar la seguridad de los participantes y la equidad competitiva. Esta atmósfera nocturna, además, añade un componente de espectacularidad y emoción pocas veces visto en esta disciplina.
El formato de resistencia de una hora lleva al límite no solo la concentración y habilidad de los pilotos, sino también la mecánica de los sofisticados coches teledirigidos. Durante sesenta minutos de competición continua, los vehículos deben soportar un desgaste considerable en sus motores, suspensiones, neumáticos y sistemas de transmisión. La estrategia de carrera, la gestión eficiente del combustible, la elección de los compuestos de los neumáticos más adecuados para las condiciones de la pista y la fiabilidad mecánica cobran una importancia aún mayor que en las pruebas cortas.
La presencia de pilotos experimentados como Arnau y Riera subraya la relevancia y el especial atractivo de esta prueba. Su participación es también un elocuente testimonio de la pasión que despierta este hobby-deporte, que combina habilidad técnica, concentración y espíritu competitivo.
Para quienes no están familiarizados con esta disciplina, el automodelismo 1/5 TT Gas «es mucho más que un simple pasatiempo», resalta Xavi Riera. Se trata de una modalidad que «requiere una notable inversión en material y tiempo, así como un profundo conocimiento técnico», expresa Riera. Los coches, a escala 1/5, son réplicas detalladas y funcionales de vehículos todoterreno, equipados con chasis robustos, suspensiones complejas y potentes motores de dos tiempos alimentados por gasolina, capaces de generar una considerable potencia. Estos no son juguetes, sino auténticas máquinas de competición en miniatura, que pueden superar los 3.5 caballos de potencia y alcanzar velocidades de hasta 80 km/h en terrenos difíciles.
Los veteranos pilotos cuentan a Soria Noticias que un coche de estas características «puede costar unos 1.000 euros». No obstante, y como ocurre con cualquier hobby, «a partir de ahí puedes gastarte lo que quieras para conseguir una máquina más pulida». Su mantenimiento «es comparable en complejidad al de un vehículo real, requiriendo una puesta a punto minuciosa antes de cada carrera», apunta José María Arnau. Pero, además de conocimientos en mecánica, «el control remoto exige una gran precisión y reflejos por parte del piloto», y las carreras son auténticas competiciones donde la estrategia puede ser tan crucial como la velocidad pura en pista.
Arnau y Riera coinciden en que «el ambiente es lo mejor de este tipo de competiciones». Destacan que «estas pruebas no tienen edad» y confiesan, entre risas, que en Soria corren «desde chavales de 17 años hasta pilotos curtidos como nosotros». Eso sí, los dos creen que «tener alguien en casa que te enganche a las carreras y el cuidado de los coches es esencial para que a un niño le pique el gusanillo».