El subinspector Javier Molina destaca la implicación y el trabajo previo del cuerpo durante unas fiestas marcadas, de momento, por la tranquilidad.
Las Fiestas de San Juan no serían posibles sin el compromiso silencioso de quienes, en lugar de disfrutar, velan por el buen desarrollo de cada acto. Entre ellos, la Policía Local de Soria, cuya labor ha sido reconocida este año con un homenaje especial por parte de la Asociación de Jurados. Uno de sus representantes, el subinspector Javier Molina, compartía en declaraciones para SoriaNoticias cómo se vive esta intensa semana desde dentro del cuerpo.
“Ponemos mucho empeño, trabajamos desde mucho antes de que lleguen las fiestas y nos comprometemos a fondo con nuestro trabajo y con la ciudad durante estos días”, explicaba Molina, destacando que la labor policial no se limita únicamente a los días oficiales, sino que comienza semanas antes, con una planificación minuciosa.
Preguntado por los momentos de mayor carga de trabajo, Molina señala varios puntos críticos. “El sábado es el día con mayor afluencia, porque coincide el fin de semana y viene mucha gente de los pueblos. El viernes, por el acto en la Plaza de Toros, es el día de mayor trabajo en un lugar concreto. Y el jueves es especialmente exigente por la intensidad de tareas en cortos periodos de tiempo, pero en un espacio muy amplio y durante muchas horas seguidas”.
Afortunadamente, y pese a la masiva asistencia a los actos, el balance provisional de estas fiestas es positivo. “Por ahora, nada. Están siendo unas fiestas espectaculares”, resumía con satisfacción el subinspector, reflejando tanto la buena organización como el comportamiento ejemplar de la ciudadanía.