El líder socialista en Castilla y León ha cargado contra la derecha y ha reivindicado la ética en política, así como ha reclamado atención a la región.
El secretario general del PSOE de Castilla y León, Carlos Martínez, ha defendido este sábado en Madrid que el Partido Socialista es un "partido limpio” que apuesta por la ética pública y el bien común. “No caben dentro quienes no defienden ese bien común y esa ética pública”, ha asegurado antes de entrar al Comité Federal que el PSOE celebra hoy.
Martínez ha insistido en que “no solamente basta con pedir disculpas, tenemos que reaccionar”, poniendo el foco en que es necesario actuar ante cualquier caso que ponga en duda los principios del partido.
También ha recordado el contexto político de su comunidad: “Venimos de una tierra que, en demasiadas ocasiones, es invisible para el foco mediático de Madrid, pero conocemos muy bien lo que significa hacer dimitir a un presidente del Gobierno para sumergirnos en 40 años de políticas de la derecha”, ha dicho, en referencia a Demetrio Madrid, “un presidente socialista inocente que dimitió para abrir un espacio de oscuridad de más de 40 años sin alternancia política en Castilla y León”.
De igual forma, el líder socialista ha tratado el impacto de la ultraderecha en las instituciones de la comunidad: “Hemos sido pioneros en la entrada de la extrema derecha en el gobierno de nuestras instituciones, y sabemos perfectamente lo que eso implica: deteriorar y demoler el Estado de bienestar y el Estado de derechos”.
También ha apuntado a la situación judicial que afecta al entorno del actual presidente de Castilla y León: “En unos pocos meses comenzará no una investigación policial, sino un juicio sumarísimo en el que están reclamando más de 800 millones de euros y 138 años de cárcel para compañeras y compañeros del señor Mañueco”, recordando que el dirigente popular fue presidente de la Comisión de Ética y Garantías en plena trama Gürtel.
Por último, ha pedido redirigir el foco mediático: “Hay que mirar a aquellos que durante 40 años han ignorado a un territorio como Castilla y León y han vulnerado los derechos que tenemos como ciudadanía, también en mi tierra”.