Tres helicópteros procedentes de la provincia han salido esta mañana hasta tierras catalanas para intervenir.
El incendio forestal de Paüls (Tarragona), originado en el Parque Natural de ‘Els Ports’, acapara las portadas de todos los medios de comunicación a nivel nacional e internacional. Las llamas que comenzaron ayer ya han afectado a más de 3.000 hectáreas, confinando a 18.000 vecinos de numerosos pueblos colindantes. Además, varias carreteras han tenido que ser cortadas en las últimas horas tras el avance del fuego.
Ante esta situación, bomberos de numerosas partes del país se han desplazado hasta tierras catalanas para colaborar en la extinción de uno de los incendios más importantes de los últimos años. El humo del mismo se puede apreciar a cientos de kilómetros. Provincias como Alicante o Murcia, a 450 kilómetros del epicentro de las llamas, se están viendo afectadas por él.
Soria no ha sido ajena a la llamada de auxilio y 20 profesionales se han movilizado esta mañana para aportar su granito de arena en la extinción de las llamas. En total, dos técnicos, dos capataces y 16 bomberos forestales de la Brigada de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Lubia se encuentran trabajando en Paüls.
Estos han acudido hasta el lugar de los hechos con tres helicópteros que han tenido que parar en Daroca (Zaragoza) esta mañana para repostar combustible. Desde las 11:00h. que han salido de la base soriana no han parado de laborar junto a bomberos zaragozanos, bajo la supervisión de los bomberos de la Generalitat de Cataluña.
Todos ellos tratan de apagar las llamas en el flanco izquierdo del incendio, una de las zonas que más preocupan en estos momentos por el viento. Las próximas horas se esperan cruciales para controlar uno de los incendios más grandes de los últimos años con más de 3.000 hectáreas afectadas.
Según los primeros datos, 300 efectivos, además 200 profesional procedentes de la Unidad Militar de Emergencias (UME) están esforzándose al máximo para tratar de controlar las llamas antes de esta noche. Tras una primera jornada muy complicada por fuertes rachas de viento que llegaron a alcanzar los 90 kilómetros/hora, se espera que las próximas horas sean más tranquilas.