La XXXVIII edición de estos cursos ha arrancado esta tarde con el acto inaugural en el Centro Cultural ‘San Agustín’. El alcalde de la localidad burgense, Antonio Pardo, ha destacado lo importantes que son para su localidad con más de 150 alumnos llegados de todas las partes del país: “Nos hemos hecho un hueco en el mundo académico veraniego”.
Los cursos de verano Santa Catalina han comenzado esta tarde en El Burgo de Osma. El Centro Cultural ‘San Agustín’ ha acogido la presentación de la XXXVIII edición de una cita que no para de crecer, atrayendo cada vez a más personas de todos los puntos del país. En esta ocasión, 150 alumnos participarán en los tres monográficos: ‘Inteligencia Artificial’, ‘Aquello que miramos. Recorridos diversos en torno al arte y la belleza’ y ‘El Gótico. Nueva luz para Europa’.
El acto cultural, al que han acudido numerosos vecinos, ha contado con la participación del alcalde del municipio, Antonio Pardo, del diputado de Cultura, Enrique Rubio, de la doctora en Historia, Anna Muntada, del vicerrector del Campus de Soria, José Luis Ruíz Zapatero, y del catedrático en biología celular de la Universidad de Salamanca, Eduardo Weruaga.
El primer edil de la localidad ha hecho hincapié en que estos cursos son fruto del “esfuerzo, del entusiasmo y del trabajo que llevamos haciendo desde hace años, apostando por la cultura y el mundo universitario”. En ese sentido, ha recalcado que las administraciones locales tienen un papel muy importante para lograr que pueblos como El Burgo de Osma “se hagan un hueco en el mundo académico veraniego; es una reivindicación para demostrar que estamos ahí”. En definitiva, ha expuesto que “si no existieran, tendríamos que inventarlos”.
A la hora de valorar los cursos de esta edición, ha afirmado que el de Inteligencia Artificial ha llamado la atención de los estudiantes con más de 50 alumnos inscritos: “Estas actividades no son para especialistas. Están destinadas a gente que quiere especializarse sobre temas concretos”.
De la misma manera, ha puesto de manifiesto que es muy importante el apoyo de la Diputación de Soria y de la Caja Rural. A ese respecto, ha recordado que se han llevado a cabo iniciativas similares en otras localidades como esta que no han perdurado en el tiempo. Por su parte, el diputado de Cultura ha valorados unas actividades que son “algo encomiable y que da un impulso a la provincia para situarla en primer plano nacional”.
Aunque no ha podido acudir, el director de los cursos, Carmelo Gómez, ha estado presente en el acto con una carta. En ella, recalcaba que este es un proyecto regional y provincial que arrancó con el objetivo de “ofrecer cursos que se centraran en temas de actualidad con profesores de primer nivel”. A los monográficos, hay que añadirles 53 actividades paralelas (exposiciones, conciertos, ponencias…) que hacen de El Burgo de Osma uno de los epicentros culturales del país desde el 21 de julio hasta el 8 de agosto.
Los alumnos de esta edición han mostrado especial curiosidad por el curso sobre Inteligencia Artificial. Su impulsor, Eduardo Weruaga, ha explicado que este monográfico tiene el reto de quitarle el miedo a la gente y de hacerles ver que la IA “es una obra de la inteligencia natural a la que le podemos poner límites éticos y tecnológicos”.
Tras una primera clase en la que se ha centrado en la inteligencia humana, incidiendo en cuáles son las bases biológicas para generar memoria y aprendizaje en el cerebro, abarcará numerosas cuestiones sobre uno de los asuntos que se encuentra en primera plana mundial, en especial, sus límites. Sus alumnos no han dudado en mostrarles su inquietud sobre la IA, preguntándole si esta va a llegar a sustituir a las personas o si puede generar cuestiones éticas durante una primera clase muy interesante.