La Junta de Castilla y León, a través de Protección Civil, ha declarado la alerta por altas temperaturas en todas las provincias de la comunidad desde este domingo, 3 de agosto. La medida se debe a la llegada de una masa de aire africano que elevará los termómetros hasta los 40ºC, por lo que se han emitido una serie de recomendaciones para la población.
Protección Civil de la Junta de Castilla y León activa desde este domingo, 3 de agosto, la alerta por altas temperaturas en toda la comunidad autónoma. Se prevé que los termómetros alcancen valores de hasta 40 grados en amplias zonas de la región, incluida la provincia de Soria.
Según ha comunicado oficialmente el Gobierno regional, la alerta por fenómenos meteorológicos adversos ha entrado en vigor a las 12:00 horas de hoy y afecta a las nueve provincias de Castilla y León. La duración de esta medida es, por el momento, indefinida y dependerá de la evolución del episodio de calor durante los próximos días.
El origen de esta situación es la llegada de una masa de aire cálida y seca procedente del continente africano, unida a una notable estabilidad atmosférica. Las previsiones apuntan a temperaturas máximas que podrían llegar a los 39-40 ºC en gran parte de la meseta, mientras que las mínimas se mantendrán elevadas, oscilando entre los 17 y 20 ºC. Se espera que este escenario se prolongue durante toda la semana, con cierta incertidumbre de cara al fin de semana.
Ante este pronóstico, el Centro Coordinador de Emergencias (CCE) de Protección Civil ha anunciado que intensificará su labor de vigilancia y seguimiento operativo. Este trabajo se realizará en estrecha coordinación con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para monitorizar la evolución del fenómeno. La alerta se desactivará una vez que las condiciones meteorológicas mejoren y el riesgo disminuya.
Desde la Agencia de Protección Civil y Emergencias se ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que extreme las precauciones y adopte una serie de medidas de autoprotección con el fin de minimizar los riesgos asociados al calor extremo. Se pone especial atención en los colectivos más vulnerables, como niños, personas mayores y enfermos crónicos. Las principales recomendaciones son las siguientes: