El Ayuntamiento de El Burgo de Osma refuerza la accesibilidad y seguridad en el municipio. La localidad cuenta ya con 25 plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida y ha señalizado con líneas amarillas desniveles en la calle Mayor y la Plaza de España para evitar caídas.
El Ayuntamiento de El Burgo de Osma avanza en su compromiso con la accesibilidad y la seguridad de los viandantes. La localidad dispone de una red de aparcamientos para personas con movilidad reducida y, recientemente, ha implementado nuevas medidas de señalización para prevenir accidentes en zonas con desniveles.
Mejorar la calidad de vida de todos los vecinos y visitantes es uno de los objetivos prioritarios del consistorio burgense. En esta línea, se continúan desarrollando actuaciones destinadas a eliminar barreras arquitectónicas y a garantizar que los desplazamientos por el núcleo urbano sean más seguros y cómodos para el conjunto de la población, con especial atención a aquellos con dificultades de movilidad.
Estas iniciativas se suman a proyectos anteriores, como el plan de rebaje de aceras que se ejecutó hace varios años en todo el municipio. Ahora, el foco se ha puesto tanto en facilitar el estacionamiento a quien más lo necesita como en advertir de pequeños obstáculos en el pavimento que pueden pasar desapercibidos.
Según la información facilitada por el propio Ayuntamiento, El Burgo de Osma-Ciudad de Osma cuenta actualmente con 25 plazas de aparcamiento reservadas para personas con movilidad reducida. Estos estacionamientos se encuentran debidamente señalizados y están distribuidos estratégicamente por las diferentes calles de la villa.
La ubicación de estas plazas prioriza las zonas de mayor afluencia y aquellas donde se concentran los servicios públicos. De este modo, se busca facilitar el acceso a lugares como el ambulatorio, el colegio o el instituto, así como al área centro de El Burgo y la Ciudad de Osma. Solo los vehículos que dispongan de la tarjeta de estacionamiento homologada pueden hacer uso de estas plazas.
Paralelamente, y con el objetivo de mejorar la seguridad peatonal, el consistorio ha procedido a señalizar varios puntos del municipio donde existen desniveles que podrían ocasionar tropiezos o caídas. Para ello, se han pintado llamativas líneas amarillas que alertan de la presencia de estos pequeños escalones.
Uno de los puntos de actuación ha sido la céntrica calle Mayor de El Burgo de Osma. En esta vía, existe una mínima diferencia de altura entre la zona de los soportales y la calzada, salvada por un pequeño escalón que a veces no es percibido por los peatones. Ahora, una línea amarilla recorre todo este borde para marcar claramente el desnivel y evitar accidentes.
Una medida similar se ha aplicado en la Plaza de España de la Ciudad de Osma. En este espacio, varios escalones de escasa visibilidad presentaban un riesgo potencial de caídas. El Ayuntamiento ha pintado de amarillo el borde de los adoquines para que no pasen desapercibidos. Según detallan desde el consistorio, esta actuación se llevó a cabo a finales del mes de julio, justo antes de las fiestas de Santa Cristina y Santiago, con la intención de prevenir incidentes durante los días de mayor concurrencia de público.