El entrenador recalca que no se marca ningún objetivo en el regreso de los amarillos a División de Honor Plata, ya que “nuestra misión tiene que ser ganar cada fin de semana”. Sobre la pretemporada, afirma que las sensaciones “están siendo buenas”, aunque reconoce que tienen que seguir mejorando.
El Balonmano Soria se encuentra en la recta final de la pretemporada. Tras tres semanas de entrenamientos, los pupilos de Oriol Castellarnau ultiman los detalles antes de arrancar una ilusionante campaña en División de Honor Plata: “Está yendo todo muy bien, exceptuando las lesiones. La gente se está adaptando a la perfección”.
Precisamente, a la hora de analizar el mercado, el joven técnico catalán no puede esconder su alegría, ya que considera que “hemos acertado en todos los fichajes; nos están dando todo lo que pensábamos que nos podían aportar”. En definitiva, expresa su agrado con una plantilla en la que también continúan varios pesos pesados del pasado curso: “Hemos escogido muy bien a los que se tenían que quedar. Son jugadores que sabíamos que nos podían aportar mucho en esta nueva categoría”.
Con todo ello, apunta que se ha completado un equipo que atesora “mucho talento y que entiende a la perfección el balonmano”. Con todos esos ingredientes, Castellarnau añade que solo hace falta que comprendan los nuevos mecanismos para afrontar la temporada con garantías totales.
Otra de las caras nuevas estará en el banquillo. Bogdan Chopenko ha aterrizado este verano en el San Andrés para ejercer como segundo entrenador: “Conoce muy bien el sistema y lo que quiero. Además, está aportando cosas nuevas a nivel grupal y extradeportivo. Estoy muy contento con él.
Las buenas sensaciones del mercado de fichajes se están trasladando a la pista con muy buenos resultados en pretemporada. Tras caer en el debut ante Anaitasuna, los amarillos han vencido a Zaragoza y Tarazona, al tiempo que han sido capaces de empatar en casa del Nava, un rival de Asobal. “Está yendo muy bien a nivel de resultados, pero no nos fiamos nada. Tenemos que seguir engrasando el sistema para llegar con todo listo a la liga”, indica.
Por ahora, lo único negativo están siendo las lesiones, con varios jugadores tocados tras los encuentros y las sesiones. Sin embargo, Castellarnau les quita importancia, “ya que son las típicas del verano; todos los jugadores estarán listos para el primer duelo liguero”.
A pesar de ser un recién ascendido, el preparador del conjunto amarillo no quiere marcarse ningún objetivo. “Nuestro reto tiene que ser ganar cada fin de semana”, manifiesta. En esa dirección, hace hincapié en que hay que observar cómo evoluciona la liga durante las primeras semanas.
A la hora de señalar favoritos, tampoco se quiere mojar, aunque reconoce que existen combinados como Benidorm, Burgos, A Coruña, Triana o Anaitasuna con buenos proyectos. Todo ello empezará a esclarecerse el sábado 13 de septiembre, fecha en la que empezará la competición. En dicho fin de semana, los sorianos recibirán a un Ibiza que es un equipo “al que conozco, dado que ha fichado a gente de mi tierra; me gusta enfrentarme a ellos en la primera jornada porque se tienen que adaptar, no obstante, cuando lo hagan darán mucha guerra”.
Los seguidores amarillos volverán a ser fundamentales este curso. El San Andrés tiene que ser una olla a presión de la que se escapen pocos puntos ante rivales muy poderosos. Para ello, el papel del ‘Frente Kalimotxo’ es esencial: “Tienen que estar como en la fase de ascenso. Esos días se creó una identidad y un sentimiento que se deben de trasladar al resto de la temporada”.
Con el objetivo de unir lazos con la afición, el club ha organizado este sábado una comida a la que acudirán todos los jugadores para “seguir haciendo familia y ser todos uno”.