Un total de 359 estudiantes ciegos o con discapacidad visual grave de Castilla y León, cinco de ellos en Soria, han comenzado el curso escolar 2025/2026. La ONCE garantiza su inclusión en centros ordinarios mediante equipos de apoyo específicos y la adaptación de materiales, destacando este año la importancia del sistema braille en el 200 aniversario de su creación.
En un año marcado por la conmemoración del 200 aniversario de su creación, el sistema de lectoescritura braille se reivindica como una herramienta imprescindible para el acceso al conocimiento. Para el alumnado con ceguera o deficiencia visual grave, el braille es el puente que les permite leer, escribir y aprender de forma autónoma, garantizando su participación activa en el currículo escolar. Según la ONCE, este código es indispensable para el adecuado desempeño académico y personal de estos estudiantes.
Para facilitar su aprendizaje y uso, la organización pone en marcha múltiples recursos. El Servicio Bibliográfico de la ONCE (SBO) se encarga de transcribir a braille todos los libros de texto y materiales impresos. Además, se elaboran mapas, gráficos y maquetas en relieve o 3D para ayudar a la comprensión de contenidos. Desde la primera infancia, se utiliza el método “Braitico”, diseñado específicamente para abordar el aprendizaje del braille desde una perspectiva manipulativa y tecnológica.
El éxito de este modelo de educación inclusiva, que escolariza al 99% del alumnado en centros ordinarios, reside en los equipos específicos de atención educativa. En Castilla y León, una red de 26 profesionales, de los más de 400 que hay en toda España, trabaja para dar soporte a los estudiantes. Estos equipos están formados por maestros, psicólogos, trabajadores sociales, técnicos de rehabilitación e instructores de tiflotecnología, entre otros.
La misión de estos profesionales es multidisciplinar. No solo atienden al alumnado en aspectos directamente vinculados a su discapacidad visual, sino que también acompañan a las familias y asesoran a los docentes de los centros educativos. Les proporcionan estrategias, herramientas y recursos para que el estudiante pueda seguir el currículo en igualdad de oportunidades que el resto de sus compañeros.
En la provincia de Soria, son cinco los estudiantes que han iniciado este curso con el respaldo de la ONCE. A nivel autonómico, la cifra asciende a 359 alumnos y alumnas ciegos o con discapacidad visual grave. La distribución por provincias en Castilla y León es la siguiente:
En cuanto a las etapas educativas, el alumnado de la comunidad se reparte de la siguiente manera durante el curso 2025/2026:
En el conjunto de España, un total de 7.250 estudiantes afrontan el nuevo curso escolar con el apoyo de los equipos de atención educativa de la ONCE, consolidando un modelo de inclusión que busca garantizar la igualdad de oportunidades en las aulas.