El Grupo Socialista en la Diputación de Soria acusa al equipo de gobierno del PP de paralizar el Aeroparque Tecnológico de Garray por una "nefasta tramitación". La diputada Esther Pérez señala que el verdadero obstáculo es un expediente incompleto, con problemas en la expropiación de terrenos y en el estudio técnico, y califica el debate competencial de "cortina de humo".
El Grupo Socialista en la Diputación de Soria ha elevado el tono de sus críticas contra la gestión del Aeroparque Tecnológico e Industrial (ATI) de Garray, un proyecto que considera estratégico para la provincia pero cuya tramitación, en palabras de la diputada Esther Pérez, se ha convertido en un ejemplo de "incapacidad de gestión" por parte del equipo de gobierno del Partido Popular.
En una rueda de prensa celebrada este lunes, Pérez ha desgranado lo que, a su juicio, son los verdaderos motivos del estancamiento del proyecto, señalando directamente a un expediente incompleto y a una serie de decisiones que ha calificado de "chapuceras". Lejos de las culpas externas que el equipo de gobierno ha esgrimido en las últimas semanas, el PSOE ha puesto el foco en la propia Diputación, advirtiendo que la búsqueda de una "mano negra" podría acabar destapando una "mano vaga".
El proyecto, concebido como un motor para la diversificación industrial y la reactivación económica de Soria, se encuentra actualmente atascado en la fase 3 de su procedimiento de autorización, un paso crítico que permitiría la construcción de la tan necesaria ampliación de la pista. Sin embargo, según ha detallado la diputada socialista, la documentación presentada por la institución provincial adolece de carencias fundamentales que impiden su avance, independientemente de qué administración sea la competente para resolver.
Esther Pérez ha explicado que para superar esta fase es imprescindible acreditar dos puntos clave: la libre disponibilidad de los terrenos y la presentación de un estudio técnico de aeródromos coherente con el proyecto definitivo. En ambos frentes, el PSOE ha sembrado serias dudas. Por un lado, el proceso de expropiación de las parcelas necesarias no ha concluido. "Sabemos que algún particular de los afectados por la expropiación presentó alegaciones (...) que deberán ser informadas y resueltas. De momento, eso no se ha producido", ha afirmado Pérez. Esta situación impide, según los socialistas, que la Diputación pueda certificar la plena disponibilidad de los terrenos, un requisito que consideran preceptivo.
Por otro lado, la validez del estudio técnico también ha quedado en entredicho. Dicho estudio se adjudicó en enero de 2024, basándose en un proyecto inicial firmado por un ingeniero de caminos. No obstante, el pasado 4 de abril, el pleno de la Diputación aprobó un nuevo proyecto, esta vez redactado por un ingeniero aeronáutico, que incluía "complementos aeronáuticos que se echaban en falta en el primer proyecto". Ante este cambio sustancial, Pérez se ha preguntado: "¿este segundo proyecto está conforme a toda la normativa? (...) ¿es necesario un nuevo estudio de aeródromos?". La incertidumbre sobre si las autorizaciones previas, como la ambiental, siguen siendo válidas con el nuevo diseño, añade una capa más de complejidad y riesgo al expediente.
La diputada socialista ha sido especialmente crítica con la estrategia de comunicación del equipo de gobierno, a quien ha acusado de buscar culpables externos para desviar la atención de su propia gestión. Frente a las insinuaciones del presidente de la Diputación sobre una posible "mano negra" que estaría retrasando el proyecto, Pérez ha ofrecido una contrapartida contundente. "No vaya a ser que vayamos a los tribunales y, en lugar de mano negra, nos encontremos con la mano vaga, la mano vaga de la diputación, que no hace con la diligencia que debería y con el rigor que se requiere la tramitación de un expediente", ha sentenciado.
Para el PSOE, esta actitud es un "denominador común" en los grandes proyectos gestionados por el PP en la institución provincial. "Resulta muy curioso que jamás, nunca hayamos oído un ápice de autocrítica", ha lamentado Pérez, quien ha recordado las múltiples subsanaciones que ha requerido el expediente a lo largo de los años. Ha criticado que se culpe a AESA, a Somacyl o a la administración central, mientras que los problemas de fondo, como la tardanza en la adquisición de terrenos o la presentación de proyectos incompletos, emanan de la propia Diputación.
Uno de los argumentos más recientes del equipo de gobierno para justificar los retrasos ha sido la incertidumbre sobre si la competencia para autorizar el aeroparque recae en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) o en la Junta de Castilla y León. Esther Pérez ha calificado este debate de "cortina de humo". Según ha explicado, aunque la Junta tiene las competencias recogidas en su Estatuto de Autonomía, existen mecanismos de colaboración regulados por un Real Decreto de 2015 para estos casos. Estos mecanismos permiten la firma de convenios para que AESA, que dispone de los técnicos especializados, analice la documentación y colabore con la comunidad autónoma para emitir la autorización final.
Además, Pérez ha asegurado que, a través del diputado nacional socialista, han confirmado la total disposición de AESA para facilitar el proceso. "Nos han aclarado que ese no debería de ser un inconveniente", ha manifestado. Por ello, ha insistido en que el problema no es competencial, sino documental. "Ninguna administración, sin que cumplimentemos el expediente completo, nos va a firmar ninguna autorización, sea la estatal o sea la autonómica", ha remachado.
A pesar de la dureza de las críticas, el PSOE ha reiterado su apoyo incondicional al proyecto del ATI, al que considera fundamental para el futuro de Soria. "Un proyecto ambicioso como es este, que trata de diversificar esa apuesta industrial que tenemos, no le podemos ver ningún pero, salvo la nefasta tramitación", ha concluido Pérez. Para arrojar luz sobre todas estas dudas, el grupo socialista ha solicitado la convocatoria de una comisión monográfica donde se presente toda la documentación y se aclare el estado real del expediente.
La sensación que ha transmitido el PSOE es que el proyecto que un día se anunció que "despegaba y cogía velocidad de crucero" sigue en tierra, no por turbulencias externas, sino por una cadena de errores en la cabina de mando. La formación ha exigido al equipo de gobierno que asuma sus responsabilidades, complete los deberes pendientes con celeridad y deje de buscar excusas que, a su juicio, solo sirven para ocultar una gestión deficiente que está poniendo en riesgo una de las inversiones más importantes para la provincia.