Las ayudas, que cubren hasta el 85% de los gastos, se destinan a la adquisición y renovación de equipos de trabajo para reducir los riesgos y aumentar la protección de los trabajadores.
La Junta de Castilla y León ha destinado un total de 7.917.110 euros durante la presente legislatura a un programa de ayudas para mejorar las condiciones de seguridad y salud en los centros de trabajo de la Comunidad. Esta inversión ha beneficiado a un total de 516 empresas, que han podido financiar la adquisición, adaptación o renovación de sus equipos de trabajo.
El objetivo principal de estas subvenciones, gestionadas por la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, es impulsar la modernización de la maquinaria para minimizar posibles riesgos laborales. Según ha informado el Gobierno regional, estas ayudas cubren hasta el 85 % de los gastos realizados por las compañías y se enmarcan dentro de las medidas acordadas en el seno del Diálogo Social.
El balance de esta iniciativa ha sido presentado este jueves por el director general de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales, José Manuel Barrios, durante una visita a una de las empresas beneficiarias en la provincia de Segovia.
La convocatoria más reciente de estas ayudas, resuelta el pasado mes de agosto, ha supuesto la concesión de 1.997.992 euros a un total de 103 empresas en toda Castilla y León. En el caso de la provincia de Segovia, la inversión de la Junta en este último ejercicio ha sido de 137.097 euros, repartidos entre nueve empresas.
Si se analiza el conjunto de la legislatura, la provincia segoviana ha recibido un total de 693.534 euros que han permitido apoyar las mejoras en materia de seguridad de 46 empresas locales.
Para conocer de primera mano el impacto de este programa, el director general, José Manuel Barrios, acompañado de la delegada Territorial de la Junta en Segovia, Raquel Alonso, ha visitado las instalaciones de la empresa Calderería de Pablos, ubicada en Valverde del Majano.
Esta compañía, con una plantilla de 25 trabajadores, ha sido beneficiaria de las ayudas en tres ocasiones, recibiendo un total de algo más de 50.000 euros. La subvención más reciente, de 27.635 euros, se ha empleado en la adquisición de un posicionador de columnas de eje horizontal, un equipo destinado a operaciones de montaje y soldadura que evita trabajos en altura y previene posturas forzadas, mejorando directamente la seguridad de sus empleados.
Durante la visita, Barrios ha destacado que este caso es un "ejemplo de la eficacia real de estas ayudas" y un reflejo del compromiso de la Junta con la seguridad en los centros de trabajo. El director general ha subrayado que estas inversiones no solo contribuyen a crear un entorno laboral más seguro, sino que también inciden en la mejora de la competitividad empresarial.
En este sentido, ha señalado que reducir el riesgo de accidentes es, además de una obligación, "un factor esencial para mejorar el clima laboral, reducir costes y aumentar la productividad".