El Ayuntamiento de la Villa Episcopal hace pública las cifras de recogida de residuos del verano, que revelan un preocupante aumento del 3,57%. Mientras tanto, el reciclaje de envases y papel se estanca, lo que ha llevado al consistorio a insistir en la necesidad de la separación en origen para evitar un encarecimiento del servicio.
El Ayuntamiento de El Burgo de Osma-Ciudad de Osma ha hecho públicos los datos de recogida de residuos correspondientes a los meses de verano, unas cifras que invitan a la reflexión. Según el informe municipal, la cantidad de basura de la fracción resto ha experimentado un notable incremento, mientras que las cifras de reciclaje de envases y papel apenas han variado, una situación que preocupa al consistorio.
Este desequilibrio no solo tiene consecuencias medioambientales, sino también económicas. El tratamiento de la basura común supone un gasto significativo que, de no optimizarse la separación en origen, acaba repercutiendo en las tasas que abonan los vecinos. Por ello, desde el Ayuntamiento se insiste en la importancia de la colaboración ciudadana para mejorar los porcentajes de reciclaje.
Los datos, que comprenden los meses de junio, julio y agosto de 2025, muestran una clara tendencia. El volumen de residuos depositados en el contenedor de restos ha crecido, mientras que los contenedores de reciclaje no han visto un aumento proporcional, lo que, según el consistorio, no refleja la gran afluencia de visitantes registrada en la localidad.
Desde el Ayuntamiento burgense se subraya que la gestión de la basura común es un proceso costoso. Estos residuos deben ser transportados en camiones hasta la planta de tratamiento de Golmayo, donde reciben el tratamiento adecuado. Este servicio tiene un coste que, en última instancia, se deriva al ciudadano a través de las ordenanzas fiscales.
La llamada a la concienciación busca, por tanto, un doble objetivo. Por un lado, cumplir con la creciente necesidad de apostar por la ecología y la sostenibilidad. Por otro, optimizar el servicio de basuras para no encarecer un coste que afecta directamente a la economía de los vecinos del municipio.
Además de los contenedores distribuidos por el municipio, el Ayuntamiento recuerda a los ciudadanos la existencia de otros servicios para facilitar la correcta gestión de los desechos. Uno de los más importantes es el Punto Limpio, que durante los tres meses de verano ha recibido 65 toneladas de materiales diversos como maderas, plásticos, voluminosos y otros enseres.
Asimismo, existe un servicio de recogida de residuos voluminosos pensado para facilitar a los ciudadanos el desecho de enseres de gran tamaño. Para solicitarlo, es necesario rellenar una instancia en el Ayuntamiento, donde se especifica el tipo de residuo. El coste del servicio es de 3 euros por residuo y con él se pretende evitar el abandono de objetos en la vía pública, una práctica que afea el entorno y puede dificultar el tránsito.