En la mañana de hoy, los trabajadores de las instalaciones deportivas municipales han pedido el cese de Manu Salvador, concejal de Deportes, por la reestructuración laboral que han sufrido en los diferentes pabellones públicos.
Las relaciones entre los trabajadores de las instalaciones deportivas municipales y el Ayuntamiento de la capital se han tensado. Esta misma mañana, el primer colectivo se ha manifestado en el polideportivo San Andrés para pedir la dimisión del concejal del área de Deportes, Manu Salvador. Estos trabajadores, han criticado el modelo de organización municipal en su campo de trabajo y han criticado la reestructuración del mismo, señalando que no se les ha avisado con suficiente antelación, exigen más personal en las instalaciones y se han mostrado contrarios a una privatización de parte del servicio. Tras la concentración, el edil ha comparecido y ha respondido a aquellos que no le quieren en el cargo.
Salvador ha señalado que "se trata de una simple reorganización del servicio". El edil ha explicado que "en cada pabellón se ha hecho un proceso selectivo para designar un encargado, que antes era un peón de otro polideportivo diferente, por eso se ha hecho la reestructuración". El concejal ha recalcado que fue una cuestión que "se preguntó al personal" y les dijeron que "no había problemas", por lo que "los técnicos del departamento lo hicieron así". Salvador ha sido muy contundente con su posición: "Habrán sentido que no quieren moverse del pabellón en el que llevan trabajando años, pero es algo que se ha hecho para optimizar recursos y dar un mejor servicio a los ciudadanos".
El concejal ha dejado claro que "las instalaciones ya funcionaban bien, pero se busca que funcionen todavía mejor". Ha puesto un ejemplo de cómo han sido estas rotaciones de persona: "El encargado de la Juventud era un peón en Los Pajaritos. Ahí queda una vacante que hemos cubierto con otro peón". El edil ha señalado que "se han cubierto las plazas a excepción de una, que está en proceso de quedar cubierta".
En relación a la "privatización del servicio", Salvador ha indicado que "nunca ha sido la intención dar ese paso". Las acusaciones y temores llegan después de que el Consistorio contratara por medio de una empresa de trabajo temporal (ETT) a un socorrista en la piscina del Castillo. "Llegó un punto en el que no teníamos servicio de socorrismo y no encontrábamos la forma de solventar ese problema. Por eso, se nos instó a recurrir a una ETT para contratar a un socorrista y se hizo de esta forma", ha dicho el edil. El representante del Ayuntamiento en el área de Deportes también ha señalado que, "cuando los trabajadores tienen horas sindicales, que es su derecho y las tienen que tener, supone problemas para el servicio que la Administración tiene que resolver, y hemos contratado así para contrarrestarlo".
De esta forma, se está produciendo un tira y afloja entre los trabajadores municipales de las instalaciones deportivas y el área del Consistorio de Deportes.