La Junta de Castilla y León ha concedido una subvención de 12.000 euros a la Mesa del Lechazo para consolidar su función como lonja de referencia. La directora general Cristina Frías ha reafirmado el compromiso del gobierno autonómico con el sector ovino, clave para la economía regional.
La Junta de Castilla y León reafirma su apoyo al sector ovino de la Comunidad con la concesión de una ayuda de 12.000 euros a la Mesa del Lechazo. Esta medida busca garantizar el correcto funcionamiento de la entidad y consolidar su papel como un instrumento fundamental para la cadena de valor de este producto estratégico.
El respaldo del Ejecutivo autonómico se ha materializado durante una visita de la directora general de la Industria y Cadena Agroalimentarias, Cristina Frías, a las instalaciones de la organización en Tordesillas. Desde allí, ha destacado la estrecha colaboración existente para asegurar la estabilidad y competitividad del sector.
Según ha detallado la propia directora, el compromiso de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural con el ovino es "incondicional". Frías ha subrayado que se trata de un sector estratégico para Castilla y León, no solo por su considerable dimensión económica, sino también por su importante valor social y medioambiental en el territorio.
La Mesa del Lechazo fue reconocida en 2022 como Lonja de Referencia en Castilla y León, un reconocimiento que pone de manifiesto su papel clave en la difusión de información transparente sobre los precios en origen. La subvención concedida por la Junta está destinada a afianzar esta labor, considerada una herramienta esencial para mejorar la sostenibilidad del sector.
Cristina Frías ha manifestado que la organización es un "motor económico y social para la Comunidad". En consecuencia, ha asegurado que "la Junta seguirá estando a su lado, trabajando de la mano con los ganaderos, las cooperativas y las industrias para garantizar un futuro próspero y sostenible".
La relevancia del sector ovino en la región se refleja en sus cifras, que lo posicionan como un pilar fundamental del medio rural. Según datos de la Junta de Castilla y León, la comunidad es líder a nivel nacional en este ámbito.
Desde la administración autonómica también se ha recordado la importancia de consumir lechazo durante todo el año para favorecer un mercado más estable. Para garantizar su origen y calidad, se recomienda a los consumidores buscar los marchamos y vitolas que certifican el producto, como la IGP Lechazo de Castilla y León y el sello Lechazo ‘Tierra de Sabor’.
La carne de lechazo se caracteriza por ser muy tierna y jugosa, con un color rosado claro y un sabor suave. A nivel nutricional, aporta proteínas de alto valor biológico, vitaminas del grupo B y minerales esenciales como el hierro, el zinc y el fósforo.